El Parlamento gallego aprobó ayer por unanimidad reclamar el traspaso a Galicia de la titularidad de la AP-9, la autopista que cruza de norte a sur Galicia y enlaza Ferrol con Portugal por Tui y cuya concesión la tiene Audasa hasta el año 2048. La iniciativa partió del Bloque y el PP decidió sumarse a cambio de eliminar de la reivindicación, tramitada mediante una proposición de ley, las referencias críticas con el Gobierno de Mariano Rajoy.

El camino que tiene por delante esta demanda es largo y no está garantizado, ni mucho menos, su éxito. La proposición tiene que ser tramitada ahora por el Congreso de los Diputados y antes de que la acepte pueden pasar tranquilamente dos años. Cuando toque debatirla, la defenderán tres diputados autonómicos. La iniciativa se acordó en un momento en que el Gobierno está en funciones y la Cámara Baja en precario por la fragmentada representación que dejaron las elecciones generales.

Pero está también por ver que los mismos partidos que apoyan la reivindicación en Galicia, la respalden en Madrid. En el pasado, Galicia ya reclamó varias veces el traspaso de la autopista, aludiendo, como ahora, a una deficiente política de peajes y a un mal servicio de mantenimiento. Pero tanto los gobiernos del PSOE como del PP rechazaron la reclamación, alegando que por su carácter internacional, al comunicar con Portugal, es competencia exclusiva del Estado.

La actual ministra de Fomento, Ana Pastor, se comprometió a estudiar la propuesta, pero también precisó que los informes jurídicos encargados refrendan este carácter estatal de la AP-9.