En paralelo al IVA, los Especiales son el otro termómetro de referencia para el consumo. Electricidad, tabaco, alcohol, productos intermedios y combustibles. Y están en su peor momento, con la intención, además, del Gobierno, de incrementarlos este año, sin que todavía esté muy claro cuál de las partidas exactamente va a hacerlo. Todo apunta a los destilados y el tabaco. Entre enero y marzo, la caída en Galicia es del 35,6%, con apenas 8,3 millones de euros en su contribución. El descenso medio en toda España es del 2,2%.

Otra vez la comunidad está entre las que contabilizan los recortes más llamativos. En este caso, solo por detrás de Murcia, donde bajan un 49,5%, y en Valencia, con un 38,5%.

Y la propia Agencia Tributaria advierte que podría haber sido mucho peor si no fuera por los cambios normativos y de gestión en el Impuesto de Hidrocarburos, que creció un 3,6% por la subida de tipos en biocarburantes, la nueva fiscalidad medioambiental que impacta de lleno en el gas natural y la incorporación al tramo estatal del antiguo Impuesto sobre Ventas Minoristas de Hidrocarburos. Sin todo esto, según el último informe del organismo dependiente de Hacienda, los ingresos hubieran bajado un 7,5%. Ante el menor crecimiento de los precios y "por una caída en los consumos más intensa que en meses anteriores" -lo que demuestra el golpe de la recesión en el bolsillo de los hogares y la actividad empresarial-, el Impuesto sobre la Electricidad también aporta un punto menos. En el de Labores de Tabaco, a las puertas de otra modificación, sigue la "inestabilidad" por el cambio de precios y de tipos del comienzo del año.