Se quedó en paro en el verano de 2011 tras años de investigación en la Universidad de Santiago y estancias en el extranjero entregado a su pasión, la astrofísica, y a un proyecto propio: "el desarrollo de un detector de blanco activo para medir reacciones nucleares". Saúl Beceiro, ferrolano de 29 años, era curiosamente el portavoz de Investigadores Precarios de Galicia, colectivo que lucha por un presente y un futuro digno de los científicos ante la falta de plazas y la reducción de presupuesto en I+D, cuando él mismo se quedó sin salidas para continuar su camino laboral en la comunidad.

No tuvo que enviar currículos. En su caso, lo llamaron directamente. La Universidad del Estado de Michigan (MSU), institución pública con unos 40.000 estudiantes, se puso en contacto con él para ficharlo. "En MSU no hacen oferta de empleo, tienen un archivo con currículos de investigadores de todo el mundo; así me encontraron, me llamaron, me hicieron una breve entrevista por skype y me invitaron a venir una semana para conocerme en persona", cuenta Saúl desde el estado de USA en el que empezó a trabajar en febrero de 2012. Una vez allí, tuvo que impartir un seminario para todos los miembros del laboratorio en la Michigan State University, institución que ostenta en estos momentos el programa de doctorado número uno de los Estados Unidos en física nuclear (incluso por delante del MIT). Además, pasó entrevistas personales con todos los profesores que lo solicitaron: "unos 20, media hora con cada uno". "Todos emitieron evaluación positiva para la contratación, que es por tres años y llevo ya uno", apunta Beceiro. Explica que la Universidad de Santiago (USC), en la que estudió Física, fue Premio extraordinario fin de carrera, investigó y fue miembro del Consejo de Gobierno durante cuatro años, "tiene un grupo muy potente en investigación de física nuclear". "Sus investigadores son altamente apreciados en la comunidad internacional, por eso me fue fácil a mi encontrar trabajo en Michigan: aquí conocían el trabajo de la gente de Santiago", indica. Beceiro está encantado con su función en el laboratorio de investigación de la universidad: el National Superconducting Cyclotron Lab (NSCL). "Estamos trabajando en la construcción de una ampliación enorme, que convertirá al laboratorio en el más grande e importante del mundo en física nuclear, el equivalente al CERN", argumenta el investigador.

Sobre si hay sitio para él en Galicia, Beceiro responde: "En empresas es difícil poder hacer lo que hago, aunque podría reciclarme hacia física médica u otros campos. En la universidad el problema es que todas las plazas se crean como profesor y probablemente hoy en día no se necesiten muchos más docentes pero sí se necesitan más investigadores para poder mantener un nivel de investigación competitivo con el resto de Europa y el mundo".