Todos los indicios y testimonios recabados por el Seprona en la investigación de las Fragas do Eume son concluyentes: el incendio que calcinó el corazón del parque natural no fue intencionado y se originó en un solo foco. Tanto el punto de inicio, como la hora, los intereses en la zona o las condiciones meteorológicas desmontan la tesis sobre la intencionalidad que mantuvo la Xunta nada más visitar la zona devastada por las llamas. Con estas conclusiones, la resolución judicial pasa por el archivo de las diligencias. "No hay autor ni dolo, por tanto al juzgado le tocará archivar el caso", dan por hecho fuentes próximas a la investigación judicial.

Aunque la Guardia Civil todavía tiene que completar el informe con algunas diligencias €se trata de pruebas complementarias que corroboran que el incendio no fue intencionado€, el atestado que ya está en manos del instructor del caso, el titular del juzgado de instrucción número 3 de Ferrol Alejandro Morán Llordén, apunta a un episodio accidental €al parecer una colilla mal apagada€ como causante del fuego en el último bosque atlántico de Europa.

Las investigaciones del Seprona concluyen que el incendio se originó en un único punto, lo que contradice la versión de "tres focos simultáneos" que trasladó el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a los medios en su visita a la zona cero al día siguiente de declararse el fuego. Se trata de un único foco situado en el lugar de a Pena do Crego, en el monte de Fontardión (A Capela). Los investigadores del Seprona, que el jueves 5 de abril €tan solo cinco días después de que las llamas calcinasen más de 800 hectáreas del enclave natural€ realizaron una inspección en helicóptero sobrevolando las zonas arrasadas. Ya entonces no tenían duda alguna de que las llamas partieron de ese punto único, situado junto a un sendero de cicloturistas en una zona elevada de difícil acceso con vehículos. "Es un valle de braña seca, con suelo de turbas, un material que cuando hay falta de humedad es un potente combustible", apuntan fuentes de la investigación.

La hora de inicio del fuego ha resultado imposible de determinar en la investigación, debido a las características del terreno y las condiciones meteorológicas. Lo que sí está claro es que a las 11.48 horas se produjo una llamada al 112 alertando de la presencia de un incendio en esa zona. No obstante, ese aviso se "minimizó", según fuentes próximas a la investigación, lo que llevó a la Xunta a dar las 15.16 como hora de inicio del incendio en el parque eumés.

El Seprona concluye en su informe la "excepcionalidad" de las condiciones meteorológicas de ese día. "El factor de humedad €aseguran€ fue determinante en el desarrollo del incendio".

Las declaraciones tomadas por la Guardia Civil a más de una treintena de personas también descartan que se trate de un incendio intencionado.

"No fue fortuito, fue intencionado con dolo o por una actitud incívica o negligente"

Pese al informe del Seprona que descarta la intencionalidad del fuego, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, manifestó sus dudas sobre las conclusiones de la investigación. Tras descartar que el incendio se produjese de forma natural, Feijóo volvió a poner sobre la mesa la posibilidad de que fuese intencionado.

"Lo que parece descartado es que el incendio se produjese de forma natural", manifestó Feijóo. "Ya sea mala intención de los incendiarios o una actitud incívica o negligente [en alusión a la colilla] lo que parece acreditar la información que tenemos de una investigación no completa es que ese incendio no fue fortuito". Así, el presidente de la Xunta dejó la puerta abierta a la posible intencionalidad. "Fue o intencionado con dolo, o culpa, producido por cuestiones negligentes. Lo más importe es acreditar que los incendiarios, sea de forma intencionada o por negligencia, causaron el fuego", defendió.