La Consellería de Cultura ha firmado hoy la Resolución por la que se inicia el proceso para declarar el Pazo de Meirás Bien de Interés Cultural (BIC), según ha informado la titular de este departamento de la Xunta, Ánxela Bugallo.
La conselleira indicó en conferencia de prensa que el proceso podría estar finalizado antes de acabar este año, ya que, aunque los organismos consultivos que deberán realizar informes al respecto disponen de un máximo de 20 meses para ello, hay "trabajo adelantado" por la labor de los técnicos y lo habitual es "no agotar" dicho plazo.
A partir de la publicación del inicio de este proceso en el Diario Oficial de Galicia (DOG), que tendrá lugar "en unos días", según el director general de Patrimonio Cultural, Felipe Arias, se abrirá un plazo de un mes en el que los propietarios de la construcción, la familia Franco o cualquier otra persona podrá presentar alegaciones.
En este sentido Bugallo explicó que la citada familia "tiene comunicación" desde hoy del inicio de este proceso legal y explicó que la Consellería encargará informe a tres organismos consultivos: la Universidad de Santiago, la Real Academia de Bellas Artes de Nuestra Señora del Rosario y el Consello da Cultura Galega.
La declaración de la construcción como BIC, con la categoría de monumento, implicaría "el máximo rango de protección", la obligación de que el edificio se abra al público, al menos cuatro días al mes, y que cualquier intervención en él requeriría una autorización del Gobierno gallego, recordó la conselleira.
El conjunto está formado por tres torres cuadradas de diferentes alturas, un piso bajo, una capilla y construcciones anexas, todo ello rodeado de jardines y bosques en los que hay otros elementos decorativos como escalinatas y fuentes, así como cruceiros y hórreos. La titular de Cultura destacó que el informe realizado por los técnicos -una historiadora del arte, una arquitecta y un arqueólogo- que entraron en el pazo el pasado 17 de abril aconseja la incoación del proceso para la declaración de BIC y subraya que las tres torres del pazo, levantadas entre 1893 y 1907, son "claramente" las que se construyeron en vida de la escritora gallega Emilia Pardo Bazán.
La relación de esta autora con el edificio, junto con el "valor intrínseco" del pazo, que es un "ejemplo singular" en la arquitectura de finales del siglo XIX y principios del XX, y el entorno paisajístico, son los argumentos destacados en dicho informe para la declaración de Bien de Interés Cultural, dijo Bugallo.
El edificio es una mansión señorial de "inspiración historicista de tendencia medievalizante, concretamente de estilo neorrománico", y otros ejemplos de este tipo de arquitectura en Galicia "no son comparables" a éste, destacó la responsable gallega de Cultura.
