Correa niega que en Gürtel exista corrupción y Pérez promete contar "la cara B"

Correa y Pérez, además de Pablo Crespo, comparecieron desde la cárcel de Valdemoro (Madrid) por el sistema de videoconferencia ante la comisión de Les Corts Valencianes que investiga la gestión de Feria Valencia, en calidad de expropietario, expresidente y exdirector de la empresa Orange Market, respectivamente.

Los tres se acogieron a su derecho a no declarar por recomendación de sus abogados, ya que podría perjudicar a su derecho de defensa en las causas judiciales que tienen pendientes, aunque Correa y Pérez finalmente respondieron al diputado socialista José Muñoz, a quien agradecieron su "educación" y "simpatía".

Muñoz animó a los comparecientes a contar en algún momento lo que pasó en el denominado caso Gürtel, no solo por interés público sino también por ellos mismos, ya que a los ojos de la ciudadanía se les ha presentado como "unos delincuentes que se han aprovechado de la Administración y del Partido Popular".

Según Correa, esta trama es "un montaje para hacer daño a un partido por otro partido a través de nuestro trasero" y defendió que los trabajadores de Orange Market "son personas honradas, normales" y sin antecedentes penales.

Aseguró que las cosas no son como dicen y que ni él ni sus socios son delincuentes, sino profesionales del "marketing", y su "desgracia" fue llegar a trabajar para un partido (en alusión al PP) y emplear "la misma estrategia comercial" que utilizaba en las multinacionales para las que había trabajado.

"¿Cómo no voy a hacer un regalo a un cliente fantástico mío? ¿Cómo no voy a regalar unos payasos a Ana Mato o a Sepúlveda, que son amigos míos?", declaró Correa, quien señaló que eso es algo que hacen las grandes empresas y se ha mostrado seguro de que los diputados también habrán recibido regalos en su vida.