Junts pel Sí (JxSí) ha ofrecido a la CUP un gobierno de transición con un solo presidente y tres "comisiones de gobierno", una de ellas dirigida por un vicepresidente, que trabajarían de forma colegiada con el jefe del ejecutivo, que se sometería a una cuestión de confianza en 10 meses. Con esta fórmula inédita JxSí trata de desbloquear la complicada situación catalana

El presidente de la Generalitat mantendría "sus atribuciones propias" y se nombraría un vicepresidente, que asumiría la comisión delegada de Economía, sin concretar nombres, aunque esta área recaería con toda probabilidad en el presidente de ERC, Oriol Junqueras. Las otras dos comisiones de Govern serían las de Asuntos Institucionales y de Exteriores, que asumiría en un principio Raül Romeva (exICV), y la del Estado de Bienestar, que sería para Neus Munté (CDC).

La estructura presentada por JxSí profundiza en la propuesta que lanzó Mas en el segundo debate de investidura: una presidencia en sus manos pero con la dirección compartida con otras tres personas. La propuesta es un nuevo intento para acercar a la CUP al acuerdo antes de la asamblea que la formación antisistema celebrará este domingo para debatir sobre la posibilidad de apoyar un gobierno de Artur Mas, el candidato de JxSí a la presidencia que los "cuperos" ya han descartado investir en dos ocasiones.

Más de 1.600 militantes de la CUP y de las entidades agrupadas en torno a Crida Constituent se han inscrito para participar en la asamblea informativa del domingo en Manresa (Barcelona). En principio, en la asamblea no se debe votar ni aprobar nada, puesto que únicamente ha sido convocada para valorar la estrategia de la comisión negociadora con Junts pel Sí y para estudiar "el camino a seguir". Para el presidente del grupo de la CUP en el Parlament, el independiente Antonio Baños, un debate con 1.600 "cuperos" demuestra que son "una organización viva, no una organización dividida".

En los últimos días, no obstante, se han sucedido la publicación de comunicados y de posicionamientos públicos de los diversos sectores que conviven dentro de la CUP o de su entorno, como los de Endavant y Arran -radicalmente en contra de investir a Artur Mas como presidente-, o el de Poble Lliure , que expresa una posición más abierta.

Los militantes de la CUP reflexionarán en torno a cuatro escenarios: mantener el 'no' a Mas; investirlo pero con condiciones, como el plan de choque con medidas sociales, la ruptura con el Estado español y la apertura de un proceso constituyente; confiar en una abstención de Catalunya Sí que es Pot tras el 20D y, finalmente, la convocatoria de nuevas elecciones autonómicas en el mes de marzo.