El candidato del PSOE a presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió ayer, en una entrevista en TVE, a "no pactar con partidos que estén en la secesión". No obstante, advirtió de que "no es momento de reproches" sobre Cataluña y, tras recordar que está de acuerdo con Rajoy en la defensa de la unidad de España, garantizó que el "secesionismo se va a encontrar con un muro".

También defendió que este conflicto necesita una "solución política, que es la reforma constitucional", a propósito de la cual reconoció que no ve posible el consenso para llevarla a cabo.

Con respecto a posibles pactos tras el 20-D, Sánchez marcó distancias con Ciudadanos al subrayar que con aquellos que lo que plantean es "una doble receta de derechas", el PSOE "desde luego no se va a sentir a gusto".

"España no necesita más derecha. No creo que la solución a la crisis de España sea ni la derecha de Rajoy, ni la suma de las derechas, la de Rivera y la de Rajoy", afirmó el líder del PSOE, que definió a Ciudadanos con "las nuevas generaciones del PP".

Por otro lado, garantizó que, si gana las elecciones, derogará "toda" la reforma laboral impulsada por el Gobierno de Rajoy y que, en cualquier caso, no abaratará el despido.