Quince días después de su derrota en las elecciones del 20N, los socialistas ya sólo esperan saber cuándo se decidirán Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón a dar el primer paso para anunciar su candidatura a la secretaría general del PSOE, algo que podría postergarse hasta pasadas las fiestas navideñas.

Las quinielas sobre quiénes aspirarán a liderar el PSOE en su 38 congreso federal -previsto para febrero- ha centrado parte de los corrillos que se han formado con motivo de la recepción en el Congreso por el aniversario de la Constitución.

Todos dan por hecho que Rubalcaba y Chacón se medirán en esa cita y que seguramente habrá otros candidatos. Un asunto del que no han podido sustraerse ninguno de los dos protagonistas principales, pese a que tanto Chacón como Rubalcaba han optado por mantener su mutismo ante los medios de comunicación y no han soltado ni prenda sobre sus intenciones.

Y es que los dos parecen estar pulsando sus hipotéticos apoyos antes de aventurarse a dar un paso al frente, según interpretan muchos de los socialistas presentes en la recepción institucional en la Cámara baja.

Rubalcaba, en una conversación informal con periodistas, ha insistido en que no tiene tomada ninguna decisión y ha recalcado que él no debe pronunciarse sobre si debe haber varios candidatos.

Igual de prudente se ha mostrado la ministra en funciones de Defensa, Carme Chacón, quien ha recurrido a una frase del médico y alquimista Paracelso para apelar a la discreción y a la tranquilidad: "La diferencia entre la medicina y el veneno está en la dosis".

El presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ha garantizado hoy su total neutralidad en el proceso de elección de su sucesor al frente del partido.

En varias conversaciones informales con periodistas en el Congreso, durante la celebración del aniversario de la Constitución, Zapatero ha asegurado que en ningún momento se decantará por uno u otro candidato a la Secretaría General, que se elegirá en el congreso del partido previsto para los días 3, 4 y 5 de febrero en Sevilla.

Un cónclave en el que Zapatero se limitará, según ha asegurado, a presentar el informe de gestión, pero sin apostar por ningún candidato.