En público lo apoyó, pero en privado masca su relevo para las autonómicas de 2011. La dirección nacional del PP se plantea el relevo de Francisco Camps, para dentro de dos años, aunque por el momento espera que el presidente valenciano sepa reconducir la crisis que atraviesa el partido, salpicado por la trama de corrupción del "caso Gürtel".

Según informó ayer la Cadena Ser, miembros de la Ejecutiva del Partido Popular reconocen que a Rajoy, a día de hoy, no le queda más remedio que seguir apoyando a Camps como presidente del partido y de la Generalitat, aunque la desconfianza hacia el líder valenciano se ha multiplicado durante los últimos días. Esa desconfianza hace tambalear su candidadura para las elecciones autonómicas del año 2011.

Esos mismos dirigentes admiten que ya nada será igual después del martes y 13 que les hizo pasar Ricardo Costa. En la sede de Génova no ocultan su malestar por la pasividad de Camps ante los desafíos y desplantes de su ex secretario general, algo que les obligó a darle un ultimátum para que abandonase cuanto antes el cargo.

La dirección nacional ha pedido a Francisco Camps que se apoye en los tres presidentes provinciales de la Comunidad para recomponer el partido y preparar en su caso una transición para 2011.

Entre los nombres que se barajan destaca el de Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, como la opción más clara para sustituir a Camps como cartel electoral, aunque no se descartan otras opciones, según informó la Cadena Ser.

Reproches

En Génova están además molestos con el ex presidente de la Xunta y senador Manuel Fraga, del que dicen que debería estar más callado sobre el "caso Gürtel". Los reproches también alcanzan a Esperanza Aguirre, aunque reconocen que les ha ganado por la mano con su reacción.

Desde el Gobierno, el ministro de Fomento, José Blanco, exigió a Mariano Rajoy que "coja el toro por los cuernos" y dé explicaciones "convincentes" y tome decisiones en relación al "caso Gürtel".

Después de que el líder del Partido Popular elogiara y pusiera toda su confianza en la figura del presidente valenciano, Blanco le pide que aclare el por qué de esta actitud cuando Camps "era amiguito del alma de los de la trama".