La novena legislatura del Parlamento vasco arrancó ayer con la constitución de la nueva Cámara, que está presidida por la popular Arantza Quiroga y que, por primera vez, no contará con ningún grupo del entorno de Batasuna. Quiroga fue elegida con el apoyo de 38 de los 75 parlamentarios de la Cámara -25 del PSE-EE y 13 del PP-, por los 36 votos a favor que recibió la hasta ahora presidenta, Izaskun Bilbao. En su primer discurso como presidenta, Quiroga destacó que la legislatura se desarrollará con una Cámara “plenamente democrática”, expresó su reconocimiento a las víctimas del terrorismo, prometió ser la presidenta de todos y dijo que tendrá como referencia a Izaskun Bilbao.
En el pleno, que contó con la presencia de invitados como el presidente del Senado, el socialista Javier Rojo, y la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, también se eligieron a los otros cuatro parlamentarios que, junto a Quiroga, integrarán la Mesa del Parlamento. En virtud del acuerdo alcanzado para propiciar un cambio político en Euskadi que traerá consigo que Patxi López sea el nuevo lehendakari, socialistas y populares se han garantizado el control de este órgano, al copar tres de sus cinco puestos.
La constitución del legislativo vasco se ha producido el mismo día en el que la sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha desestimado el recurso de EA, que reclamaba un escaño del PSE.
Junto a Quiroga, los socialistas Blanca Roncal y Jesús Loza ocuparán la vicepresidencia primera y la secretaría primera, respectivamente. Los otros dos puestos han recaído en Iñigo Iturrate y Mikel Martínez, del PNV.
En una entrevista a Radio Euskadi, la nueva presidenta del Parlamento vasco consideró ayer que se puede dar “la transversalidad” en la Cámara porque PP y PNV pueden llegar a acuerdos en materia económica, “sabiendo que tiene un acuerdo” con el PSE-EE. Además, dijo que estudiará euskera y que ya lo entiende, aunque no se atreve a hablarlo.
Quiroga mostró su esperanza en que “se lo pongan fácil” en esta legislatura y que pueda llegar a agotar el mandato.
Rajoy promete lealtad a los socialistas
El presidente del PP, Mariano Rajoy, prometió ayer “lealtad” al pacto con el PSE y definió a la nueva presidenta del Parlamento Vasco, Arantza Quiroga, como la “imagen del cambio político que se va a producir en el País Vasco en los próximos cuatro años”.
La elección de Arantza Quiroga es una muestra para el PP de que “el cambio ha llegado con libertad, estabilidad y convivencia”.El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, aseguró que demuestra que el cambio ha llegado con “libertad, estabilidad y convivencia”, y expresó su “firme convicción” de que ese cambio “va a perdurar”. Según dijo, el cambio se refleja en que “no están los de Batasuna en el Parlamento vasco” y la presidenta ha sido elegida en la primera votación, “no como en la anterior legislatura con la elección de Izaskun Bilbao, que tardó un mes en salir”. “Este cambio es tranquilo, sensato, estable y va a perdurar”, señaló.
El portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, destacó “la normalidad democrática” con la que se ha desarrollado la constitución del Parlamento vasco y confió en que en esta legislatura los políticos se preocupen “de lo que realmente importa a los ciudadanos, que son los problemas del día a día y la crisis económica”.
El representante socialista quiso “desmontar algunas falacias que se están contando en estos días” y destacó que “no es cierto que exista ninguna tradición ni escrita ni no escrita de respetar la lista más votada a la hora de optar a la presidencia”.
En cambio, el PNV asegura que PP y PSE llegarán al Gobierno vasco “por una decisión judicial, no por un cambio en la sociología electoral” y denuncia que no se ha respetado el “pacto no escrito” de que la fuerza más votada presida el Parlamento.
Para EB, la legislatura estará “presidida por el frentismo”.
