El contingente de trabajadores extranjeros estables previsto para 2009 en España "no llegará a las 1.000 contrataciones", frente a las 15.731 que se habían contemplado este año, según acordó ayer en el Consejo Superior de Políticas de Inmigración y remitido al Consejo de Ministros para su aprobación antes de final de año. Con respecto a Galicia, únicamente se solicitaron 140 contratos en el exterior,.

En concreto, Galicia pidió a 140 trabajadores extranjeros para contratar en origen y para desempeñar únicamente en la provincia de Lugo. De ellos, 75 son para cubrir trabajos como mecánico naval y otros 25 se pidieron para cubrir plazas como patrones de pesca. Las restantes cuarenta ofertas de empleo a inmigrantes serán para cubrir trabajos como podadores o motoserristas forestales.

Cabe destacar que durante el pasado ejercicio Galicia ofreció 1.345 puestos de trabajo a los inmigrantes para cubrir puestos en las cuatro provincias gallegas. En concreto, A Coruña ofrecía 629 puestos de trabajo; Lugo, 497; Ourense, 34, y en la provincia de Pontevedra, los restantes 185 puestos de trabajo. Las actividades profesionales que se ofrecían cubrir en su mayoría eran las de camareros (241), encofradores (135), ferrallistas (125) y cocineros (120).

Un millar de contratos

La directora general de Inmigración del Ministerio de Trabajo, Marta Rodríguez Tarduchy, explicó que este descenso en el Estado español por encima de las 14.000 contrataciones se debe a que en la actualidad "hay trabajadores en España" para cubrir los puestos disponibles. No obstante, señaló que "en la peor de las situaciones, siempre harán falta determinadas profesiones". Esta cifra recoge el número de trabajadores extranjeros con contrato de duración superior a un año que cada comunidad autónoma prevé necesitar para 2009 en función de las distintas ocupaciones. El resultado es rebajado por el Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE), que cruza las vacantes previstas con el número de parados que están en España dispuestos a ocuparlas, aunque se encuentren en distinto territorio.

Según explicó Tarduchy, la cifra de contrataciones previstas aún no es definitiva porque Cataluña, la comunidad autónoma que más trabajadores había previsto necesitar, ha revisado a última hora sus estimaciones mermando significativamente el total de contratos estables previstos para ofertar en el extranjero, por lo que la propuesta deberá ser revisada de nuevo por el SPEE. "Este es un sistema de contratación que resuelve muy bien las necesidades de los empresarios cuando las tienen, en el exterior", señaló, para incidir en que el contingente es "el núcleo" de la política de inmigración española, que vincula la entrada en España a las necesidades del mercado laboral.