El Partido Popular de Ourense está acostumbrado a que las noches electorales sean de fiesta. La formación dirigida desde 2010 por José Manuel Baltar y antes por su padre, José Luis Baltar, ha ganado siempre en esta provincia imponiéndose con sobrada ventaja ante a sus opositores. Los resultados, calificados de "históricos" por el propio presidente tras el escrutinio del 25-S consiguen un hito para este partido que es colocar a nueve diputados en el Parlamento de Galicia frente a los cinco que suman sus rivales, alargando todavía más la distancia que le separa de la oposición y ampliando una hegemonía ratificada con contundencia en las urnas. 53 de cada 100 ourensanos con derecho a voto eligieron esta opción el domingo situando a Ourense como la provincia que más ha respaldado el proyecto de Alberto Núñez Feijóo.

El triunfo, señala Baltar, "es de todos", y no dudó en llamar a las cosas por su nombre: "Ourense ha querido que el PP arrase en las urnas". Consolida así una escalada que se inició en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre después de una ligera caída en las municipales de mayo de 2015, cuando los 'populares' retrocedieron cinco puntos al pasar del 49% de los votos que habían conseguido en las autonómicas de 2012 a casi el 44%. A partir del 20-D, el respaldo al PP no ha parado de crecer, demostrando que esta formación no solo resiste sino que es capaz de sumar. Tras rozar casi el 45% de los votos en las elecciones a las Cortes Generales de diciembre, en las repetidas el pasado 26 de junio el partido de Baltar recibió los votos de prácticamente la mitad de los electores ourensanos, concretamente el 49,63%.

Para la nueva cita con las urnas el 25 de septiembre y con solo tres meses de diferencia el PP de Ourense se propuso crecer un poco más y se marcó llegar al 50% como objetivo. El 53,11% supera con creces la meta fijada y sitúa al partido como la fuerza más votada en 88 de los 92 ayuntamientos de la provincia. Solo se le resisten tres concellos gobernados por el PSOE en los que este partido sigue siendo mayoritario: Parada de Sil, Entrimo y Calvos de Randín, y el de Vilar de Santos, donde ganó En Marea. El PP venció en el feudo del BNG, Allariz, una de las victorias que más enorgullece al partido.

Baltar, que compareció la noche electoral acompañado de la cabeza de lista, Marisol Díaz Mouteira, y del número 2 del partido en Ourense y coordinador de campaña, Rosendo Fernández, quiso agradecer el esfuerzo a todo el equipo, y especialmente el de los 2.000 interventores y apoderados que trabajaron durante la jornada electoral. "La victoria es gracias a vosotros, a la fuerza del PP, nadie puede aspirar a esto, nadie tiene un partido como el que nosotros configuramos, con más de 26.000 afiliados".

Baltar felicitó a todos por el empeño en una campaña "única", con más de 300 actos "pisando todos los concellos, hablando de tú a tú a la gente". Un triunfo de todos, reiteró, que garantiza "cuatro años más de progreso con un gobierno sólido y estable", y un mensaje también para España sobre como se hacen las cosas, "como las hacemos en Ourense".

El presidente reconoció sentirse "orgullosísimo" de su partido y de una campaña electoral "limpísima, como ninguna otra". Sin tiempo para el descanso, Baltar emplazó a su equipo la misma noche electoral a trabajar ya para las elecciones municipales de 2019, "y si caen unas generales por el medio, a trabajar para repetir este histórico resultado", indicó ante las posibles terceras elecciones. Y lanzó un mensaje a Pedro Sánchez: "España entiende hoy lo que se está haciendo y el PSOE quedó a la altura del betún".