La Comisión Europea ha recortado en cinco décimas su anterior previsión sobre el aumento del PIB español, debido a la contracción del sector inmobiliario. Bruselas considera que el ajuste de la vivienda puede dejar al sector en sólo una tercera parte de su tamaño actual en tres años, lo que afectará de forma importante a la creación de empleo y al consumo privado. De este modo Bruselas rebaja en una décima la previsión de crecimiento español realizada por el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero que el pasado viernes hacía un reajuste de sus cálculos y situaba el crecimiento nacional en el 2,3%. Pero las malas noticias desde Europa no cesan ahí. Según la Comisión, el paro se situará en España el próximo año en el nivel más alto de la UE y el superávit desaparecerá también ese mismo año.

Tal y como ya adelantó el vicepresidente económico español, Pedro Solbes, el pasado viernes, la Comisión Europea ha hecho públicas hoy su revisión de las previsiones de crecimiento para España ante el calado de una crisis inmobiliaria que, según ha admitido el propio Ejecutivo de Rodríguez Zapatero, está siendo más profunda de lo esperado. Así, Bruselas afirma que la economía española será la que sufra el mayor ajuste de entre las grandes de la UE, pues su crecimiento pasará del 3,8% en 2007 al 2,2% para acabar creciendo un 1,8% en 2009.

Según ha publicado hoy la Comisión, mientras la previsión para 2008 casi coincide con la del Gobierno español, que Solbes fijó en el 2,3% el viernes, el cálculo del Ejecutivo comunitario para 2009 sí difiere más del dato del Ministerio español, también en el 2,3%, y se sitúa más en línea con el resto de instituciones internacionales como consecuencia de la persistencia de las turbulencias financieras, la desaceleración en EE UU y la subida de las materias primas.

Pese a la ralentización, España crecerá este año medio punto más que la media de la eurozona (1,7%) y dos décimas más que el conjunto de la UE (2%). Sin embargo, en 2009 el diferencial de crecimiento con la eurozona se estrechará a sólo 3 décimas (los países que comparten la moneda única crecerán de media un 1,5% el año que viene) y España crecerá al mismo ritmo que el conjunto de la UE.

Más paro e inflación

En cualquier caso, Bruselas alerta de que el nivel de paro aumentará alrededor de un punto porcentual al año en 2008 y 2009, ya que se desacelerará la creación de empleo y la economía no será capaz de absorber los flujos de inmigrantes. Para este año, el Ejecutivo comunitario pronostica una tasa de paro del 9,3% de la población activa, y para 2009 aumentará hasta el 10,6%, el nivel más alto de los Veintisiete países de la UE.

En sus tradicionales previsiones económicas de primavera, el Ejecutivo comunitario asegura que el nivel de inflación de España alcanzará de media este año el 3,8%, lo que situará el diferencial de precios con la eurozona en un punto porcentual. En 2009, la contracción de la demanda interna reducirá las presiones inflacionistas y la tasa de inflación bajará al 2,6%.

Además, Bruselas prevé que el superávit presupuestario se reduzca este año al 0,6% frente al 2,2% registrado en 2007, como consecuencia, entre otros factores, de la rebaja fiscal de 400 euros para todos los contribuyentes. En 2009, el superávit desaparecerá por completo y se alcanzará una situación de equilibrio presupuestario, aunque la Comisión no descarta que este escenario pueda incluso adelantarse a 2008. Pese a ello, la deuda seguirá bajando hasta el 35,3% este año y el 35,2% en 2009.

El Ejecutivo comunitario asegura que en un contexto de condiciones de crédito más estrictas, "el ajuste en el sector de la vivienda podría producirse más rápidamente de lo esperado, ralentizando todavía más el ritmo de crecimiento del empleo y del consumo privado".

Además, los hogares españoles están altamente endeudados casi exclusivamente a tipos de interés variables, por lo que se encuentran "altamente expuestos a posibles aumentos en el coste del crédito". Finalmente, Bruselas alerta de que "la financiación de la creciente deuda externa del país puede pesar todavía más en la actividad doméstica".

Ajuste estructural en la construcción

La Comisión considera que el sector de la vivienda en España "se encuentra inmerso en un proceso de ajuste estructural, y no cíclico, hacia un nuevo equilibrio". Su estimación es que el tamaño del sector se reducirá un tercio en términos reales durante los próximos 3 años. De acuerdo con este escenario, la inversión en vivienda caerá este año un 5%, cifra que se verá en parte compensada por la inversión en infraestructuras y en equipos. Pero en 2009, la inversión en vivienda caerá un 15% y ello pesará más sobre el crecimiento porque la inversión en infraestructuras no será suficiente para contrarrestar esta caída.

Por lo que se refiere al consumo privado, el Ejecutivo comunitario alerta de que está perdiendo impulso y de que las malas perspectivas de crecimiento del empleo se traducirán en una reducción de la renta disponible. Asegura que el paquete de estímulo fiscal aprobado por el Gobierno dará resultados durante la segunda mitad del año y por ello en 2008 el consumo privado todavía crecerá un 2,25%.

Así, el déficit por cuenta corriente de España seguirá aumentado durante los próximos dos años hasta el 11% en 2008 y en 11,2% en 2009. Además, Bruselas alerta de que la competitividad de la economía española frente al resto de la eurozona seguirá deteriorándose, no sólo porque se mantiene el diferencial de inflación sino porque se incrementarán los costes laborales. Sus cálculos son que la productividad crecerá un 1% al año.