El Pontevedra juega hoy la vuelta de los octavos de final de la Copa Federación ante el Rápido de Bouzas en el estadio Baltasar Pujales.

Los hombres de Luisito están obligados a remontar el 2-3 del encuentro de ida en Pasarón, que se diputó el pasado día de Reyes y en el que el equipo pontevedrés fue inferior a su rival y se mostró falto de actitud a la hora de afrontar la competición ante un rival de Tercera División que dominó la mayor parte del encuentro.

Esta competición está siendo usada por Luisito para dar oportunidades a los menos habituales como Tomás, Loureiro o Miky, jugadores jóvenes que necesitan minutos para ganar en confianza y ritmo de competición. Además de los posibles jugadores del filial que el técnico de Teo decida llevar a Bouzas, como ocurrió en la pasada eliminatoria en Luanco donde debutaron jugadores como Richard o Abraham.

El Baltasar Pujales puede ser también el escenario donde se produzca el debut del reciente fichaje lerezano, el guardameta llegado desde el Huracán Valencia, Vicente Company, toda vez que Sergio Lloves estaba siendo el portero habitual en la copa del equipo.

El valor doble de los goles fuera de casa obliga al Pontevedra a ganar por una diferencia de dos goles o, en el caso de que la victoria sea por un tanto, deberán marcar al menos cuatro goles para pasar de ronda.

En sus últimas cuatro visitas al estadio de los aurinegros, el Pontevedra se volvió a casa con los tres puntos bajo el brazo, si bien en todas ellas lo hizo con una victoria por la mínima que sería insuficiente para poder alcanzar hoy los cuartos de final. El Rápido de Bouzas consiguió además, el pasado día de reyes la primera victoria de su historia en partido oficial en el estadio de Pasarón, por lo que la motivación del equipo es máxima para continuar vivos en una competición en la que tras el partido de hoy ya solo quedará un conjunto gallego en lidia.

Tanto el Pontevedra como Luisito tienen un pasado ligado a esta competición. En el caso del club granate, resultó vencedor en el año 2007, mientras que Luisito la conquistó con el Ourense hace dos temporadas.

El premio de la Copa RFEF y la inscripción en el palmarés de la competición viene acompañado por sustanciosas recompensas para los clubes que lleguen a las últimas rondas, puesto que el vencedor final se embolsará 90.152 euros, y el subcampeón, 30.051.