Uno de los dos entrenadores sí quedó "satisfecho" con el resultado del partido. El equipo de Hervás no creó muchas ocasiones claras de gol, pero a pesar de ello sí puso contra las cuerdas a los granates en los últimos 20 minutos de partido, haciendo incluso sufrir a los de Luisito. "Fue un partido igualado, pudimos haber ganado cualquiera de los dos", señaló Hervás.

El técnico no entró a valorar la polémica decisión arbitral que acabó con el gol de Verdú anulado. "Estoy contento y satisfecho por como se comportaron mis jugadores ante un rival que está en un buen momento de forma", señalaba el entrenador.

Dada la situación en la que se encontraban los locales, el técnico apostó por mantener a los jugadores de inicio, hasta el punto de ahorrarse dos de los cambios permitidos. "Hay jugadores que tienen que dar más que y otros que vienen muy fuerte desde atrás", apuntaba, avalando así los minutos finales en los que encerró al Pontevedra.