Rubén Blanco cumple su segunda temporada como jugador de la primera plantilla del Celta, con el que ha disputado cuatro partidos de Liga y cinco de la Copa del Rey. Inició el campeonato liguero como titular, ante la baja por sanción de Sergio Álvarez, pero una inoportuna luxación en el hombro en los minutos finales del partido ante el Levante le llevó al quirófano. Tras dos meses de recuperación, el guardameta de Mos, de 20 años de edad e internacional con las categorías inferiores de la selección española, recibió el alta médica el lunes y vuelve al equipo con más ganas que nunca para hacerse con la titularidad. Así lo reconoció ayer en la sala de prensa de A Madroa. El sábado espera entrar en la convocatoria para el partido ante la Real Sociedad en Anoeta. La eliminatoria de Copa de diciembre, ante el Almería, podría suponer su vuelta a la competición oficial, pues Sergio sigue siendo el portero titular en la Liga.

"Mi objetivo es estar al cien por cien lo antes posible. Desde que el lunes recibí el alta, intento ganarme el puesto para ser titular. Soy ambicioso y quiero jugar, pero también sé que ahora es difícil entrar en el once por el nivel que están ofreciendo los que están jugando", señaló Rubén Blanco.

"Una lesión siempre te perjudica, da igual la situación que estuvieras viviendo. Nunca son bienvenidas. No sé si Sergio seguirá jugando. Como siempre digo, yo trabajo para jugar el fin de semana", dice.