El Pontevedra tendrá que dar un rodeo psicológico en su camino hacia Puertollano. Ese itinerario figurado lo tomará para llegar con más posibilidades al último de los partidos por el ascenso y pasa obligatoriamente por Ordes y As Pontes. Son las paradas en las que, durante la liga, logró los resultados que ahora le valdrían para alcanzar su sueño o, al menos, para forzar una prórroga en la que seguir luchando por ser un equipo de Segunda División B.

Los positivos datos de los granates a domicilio se ven reducidos a la hora de seleccionar aquellos resultados en los que ganaron por dos o más goles. Fueron las victorias cosechadas ante el Órdenes por 0-2 en la jornada 16 (con goles de Kevin Levis y Carnero en los últimos 20 minutos de encuentro) y el As Pontes por 1-4 en la número 27 (tantos de Javi Otero, Pablo Carnero -2- y Benja). Estos son los únicos marcadores con los que Manu Fernández y los suyos contrarrestarían la victoria por dos dianas a cero que logró el Puertollano en el partido de ida.

El resultado que los pontevedreses consiguieron en Ordes les permitiría forzar la prórroga y continuar peleando 30 minutos más o incluso en los penaltis por lograr el pasaporte que les llevase a Segunda División B. Un marcador tan amplio como el firmado en As Pontes enviaría directamente a los granates a su categoría natural, en la que más temporadas han militado a lo largo de toda su historia (30). Ya con el 0-3 o el 1-3 el éxito estaría garantizado.

Aunque esas dos únicas veces que el Pontevedra ganó por dos o más goles a domicilio puedan resultar escasas, lo cierto es que éstas se produjeron en encuentros de rivalidad directa. La cita frente al Órdenes se produjo a punto de terminar la primera vuelta, cuando este equipo entraba en las quinielas de conjuntos que podrían terminar la liga en la parte alta. Más celebrado fue el triunfo en As Pontes ante un rival que solo se despidió de las posibilidades de jugar el play off en la última jornada. Pese a que concluyó en la quinta plaza, el equipo ejerció de líder buena parte del campeonato.

Además, en las filas granates son conscientes de que una de sus especialidades son los partidos a domicilio, aunque con victorias cortas. Por ello para este encuentro de vuelta la asignatura principal será afinar la puntería. El 40 por ciento de sus triunfos en la campaña regular se produjeron a domicilio.

Manu Fernández y los suyos se obligan ahora a firmar un triunfo en campo ajeno, algo que lograron 9 de las 22 ocasiones en las que celebraron los tres puntos. Pero en esta ocasión solo vale que sea por dos o más goles de diferencia. Los granates ya confiaron en su capacidad a domicilio para superar la primera eliminatoria contra el Portugalete, cuando ganar era obligatorio en la vuelta para pasar de ronda.