El Club Ourense Baloncesto firma uno de los peores registros en la LEB Oro. Solo ha logrado ganar uno de los siete encuentros disputados y ocupa el farolillo rojo de la clasificación, en una competición donde pierden la categoría los dos últimos clasificados a la LEB Plata.

Un equipo que tendrá que afrontar en este mes de noviembre, cuatro citas muy exigentes y ante equipos como el Prat Joventut, Lleida y Melilla, que cuentan con unas excelentes plantillas y el único rival con las fuerzas equilibradas sería el Cáceres. Además de no poder contar en dos partidos con la presencia del jugador finlandés Roope Ahonen que tiene que jugar con sus selección, una baja muy importante para el conjunto cobista, pues era de momento el jugador que más le estaba aportando al cuadro ourensano.

Un mes comprometido

La primera final del COB, será el próximo sábado ante el segundo clasificado el Prat Joventut, un equipo que esta siendo uno de los conjuntos revelación de la temporada y que en su cancha aún no ha perdido ninguno de los encuentros disputados.

El día 17 en el Pazo Paco Paz se mide al Lleida, un conjunto que anda por el medio de la tabla y que vendrá a aprovecharse del mal momento de los ourensanos que no acaban de arrancar en estos inicios de la temporada.

El día 25 le toca de viajar ante el Cáceres, un equipo que tampoco anda sobrado, pues ha contabilizado 2 victorias, una cancha donde a los cobistas se le suele dar bien en otras temporadas.

Y para rematar el mes, llega de nuevo al Paco Paz el Melilla de Baloncesto, uno de los equipos grandes de la categoría que ocupa la quinta plaza con 5 victorias y dos derrotas. Cuenta en sus filas con dos exjugadores cobistas muy apreciados por la afición ourensana el pívot Fran Guerra y el escolta Diego Kapelan, el equipo necesita dar un golpe encima de la mesa, pues en caso contrario la permanencia a pesar de que quedan muchos partidos se le podría complicar, y el presidente Camilo Álvarez tampoco tiene previsto de momento de hacer fichajes.