El Ourense Envialia se plantó ayer en las semifinales de la Copa de España tras vencer al Burela en el pabellón de A Seca de Poio, donde a las 20.00 horas de hoy deberá superar al Universidad de Alicante, verdugo ayer del Roldán, para clasificarse para la final del domingo.

Con unos primeros compases de tanteo comenzaba un choque entre dos conjuntos que se conocen a la perfección y que optaban por tener posesiones largas. Tras un intercambio de llegadas sin peligro, llegaba el 0-1 a los cuatro minutos, obra de Marta de disparo lejano escorada hacia la derecha para superar por bajo a Jozi.

Intentó reaccionar el conjunto lucense buscando una mayor posesión de balón, pero el Ourense conseguía abrir hueco con el 0-2, obra de Antía de vaselina por encima a pase de Chiqui. La diferencia obligaba a solicitar tiempo muerto al técnico del Burela. A menos de ocho minutos del descanso, las de A Mariña optaba por el juego de cinco con Beta Mateos. Conseguían prolongadas posesiones de balón en estático, pero no encontraban resquicios entre la doble línea defensiva en diez metros de un Ourense muy ordenado. De esta forma se llegaba al descanso.

En la reanudación, el Burela abandonaba el juego de cinco, imprimiendo gran velocidad a sus transiciones, presionando la salida del balón de un Ourense al que le costaba mantener la posesión, pero que al contragolpe podía encarrilar su pase a semifinales. A los 29 minutos, de nuevo el Burela optaba por el juego de cinco, con Shiori como portera jugadora. El riesgo para la escuadra naranja era mayúsculo, con un Ourense que de disparo lejano a puerta vacía podía sentenciar el partido, una vez que el Pescados Rubén no hallaba la forma de finalizar con peligro en boca de gol, salvo con remates de media distancia de Cilene o Dany que repelía la zaga ourensana.

A algo más de dos minutos de la conclusión, Judith de disparo exterior en el juego de cinco, enviaba el remate pegado al palo de la portería defendida por Vane para añadirle emoción al desenlace. A menos de un minuto, Chiqui desde cancha propia anotaba a puerta vacía el 1-3, pero a poco más de 30 segundos, Cilene de potente remate a la escuadra de disparo exterior volvía a meter de lleno al Burela en el partido, si bien, en los instantes finales el equipo entrenado por José Carlos Martín, Chipi, templó sus nervios y ahogó las últimas posibilidades de un conjunto naranja que lo dejó todo sobre la cancha.