Tras el parón de Semana Santa se reanuda este domingo la Preferente Autonómica con un derbi provincial muy interesante, el que van a jugar desde las 17.00 horas en el campo de A Tella el Nogueira de Ramuín y el segundo clasificado, el Arenteiro. El conjunto carballiñés necesita sumar los tres puntos para mantener la plaza de ascenso que ocupa en la actualidad a Tercera División, pero un traspiés y una victoria del Estradense ante el Porriño daría un vuelco en la tabla a falta de seis partidos para que finalice la competición, aunque todavía está pendiente una resolución definitiva sobre la reclamación del equipo de A Estrada por alineación indebida del Sanxenxo. Los de Alberto Ecay no se juegan nada, pues ya tiene media permanencia en el bolsillo para la próxima temporada, pero tratará de sumar los tres puntos.

El penúltimo clasificado, el Polígono de San Cibrao das Viñas, ya tiene recambio para el banquillo hasta el final de la temporada. Anxo Valcárcel presentó su dimisión tras el último encuentro y será sustituido por el preparador físico, Borja Ferro, que debuta el domingo (17.00 horas) en el Antonio González Blanco en el encuentro ante el sexto clasificado, el Valladares.

El Ourense CF, que se encuentra a tres puntos del ascenso, tiene una excelente oportunidad el domingo en el campo de Baltar de sumar tres nuevos puntos ante el Portonovo, un equipo que marcha clasificado en la 18º posición y que pelea a muerte en cada partido por mantener la categoría para la próxima temporada. Los de Fran Justo pasan por el momento más dulce y esperan sumar los tres puntos para después en las cinco jornadas restantes pelear por el ascenso a la espera de un tropiezo del Arenteiro o Estradense que son los equipos que los anteceden en la tabla.

El último clasificado, el Verín, que suma 24 puntos, quiere seguir soñando en las seis jornadas para intentar mantener la categoría, pero las cosas marchan mal para los de Zorrilla, que no son capaces de levantar la cabeza y cada vez queda menos tiempo para mantener la categoría. En cuanto hay vida, hay esperanza para los dos equipos ourensanos.