La falta de acierto rematador condenó a un Domaio que no pudo pasar del empate ante el Juventud de Cambados y que se cae por primera vez en mucho tiempo de los puestos de ascenso a Preferente Autonómica. La irregularidad está pasando una excesiva factura a un conjunto moañés que está fallando en el momento decisivo de la temporada y que debe afrontar las tres últimas jornadas como tres auténticas finales por un objetivo que no se marcaba a principios de Liga.

Ayer los moañeses no tuvieron fortuna de cara a la portería contraria en un partido que tampoco afrontaron en las mejores condiciones. Las bajas no permitieron a Aurelio Estévez realizar ningún cambio (solo el portero suplente y dos centrales estaban en condiciones en el banquillo) en un choque con dos partes diferenciadas. Comenzaron dominando los visitantes en el arranque del duelo, disponiendo incluso de una ocasión para marcar. El Domaio se hizo luego dueño del balón y tuvo oportunidades por medio de Taran, Diego y Javi.

Pero fue en la segunda parte, y con uno más sobre el terreno de juego, cuando los locales embotellaron a su rival, que no obstante se adelantó en un error en la salida de balón. Luego Vasco, Curra, Javi y Diego en tres oportunidades muy claras pudieron dar la vuelta a un marcador que no se movió hasta el descuento. Fue entonces cuando Carlos puso las tablas desde el punto de penalti.