Vilagarcía se ha convertido por méritos propios en una plaza de obligada referencia para los mejores clubes del planeta fútbol. La decimonovena edición ha servido también para romper nuevas barreras en el continuo crecimiento del Arousa Fútbol-7. La presencia de un club venido expresamente de Estados Unidos para participar, como es el caso del FC Dallas, es solo una muestra más de lo que supone participar sobre el césped de A Lomba.

La dimensión que ha alcanzado este evento queda también de manifiesto en el impacto económico que genera no solo en Vilagarcía sino en toda la comarca. La expedición norteamericana es un buen ejemplo de ello. La reserva de cincuenta habitaciones en el Hotel Pazo Rial descubre la seriedad con la que se han tomado este torneo. Por si fuera poco, han venido acompañados por Alfonso Mondelo, el director deportivo de la Major Soccer League, o lo que es lo mismo, la competición más importante en el país de las barras y estrellas. Su interés en todo lo que rodea a la competición es el reflejo palpable de su apuesta por la formación. Entienden este viaje como una oportunidad de adquirir conocimientos tanto en lo futbolístico como en los organizativo.

La presencia de Guti en el banquillo del Real Madrid es otra de las curiosidades de esta edición. El que fuera durante muchos años el 14 blanco está dando sus primeros pasos en los banquillos en el que fue el club donde logró sus mayores éxitos deportivos.

Tampoco faltaron caras conocidas en las gradas como la de Fernando Vázquez o el responsable de cantera del Celta de Vigo, Toni Otero tomando buena nota tanto de sus jugadores como de los muchos talentos en ciernes que disputan esta edición.

El sello tradicionalmente italiano se ve este año también por partida doble. El jefe de expedición del Inter de Milán no se desprendió en ningún momento de su americana y su corbata pese al enorme calor que se pudo padecer ayer en A Lomba. Aparte de la elegancia que se le presupone a los vecinos del Mediterráneo, otro de sus toques de distinción es la impresionante condición física de sus jugadores. Tanto milanistas como turineses poseen en sus filas las plantas más imponentes de toda el torneo, cuestión que adorna una capacidad competitiva fuera de toda duda.

La organización también merece una mención especial en una cita en la que todo está bajo control. Desde el protocolo de recepción hasta la perfecta sincronización para que todo se desarrolle sobre el guión. Tampoco falta el desfile de los equipos participantes previo al inicio de los encuentros tras pasar por un arco de entrada al campo. Todo ello en un ambiente de deportividad máxima tanto dentro como fuera del campo. Tampoco faltó el speaker oficial del Obradoiro. Un Javier Masaguer que cantó todos y cada uno de los goles que ayer tuvieron lugar.

El transcurso de la primera jornada también sirvió para dejar claro que la ilusión de los jugadores supera incluso las adversidades meteorológicas. La hidratación fue ayer medida obligatoria ante los más de 30 grados que calentaban ayer el escenario de los encuentros. El césped tuvo que ser regado una y otra vez para refrescar el fútbol que los equipos desplegaron sobre el verde.

Bastaba con ver las caras de los jugadores para comprobar de manera directa lo que supone disputar el Arousa Fútbol-7. Y lo mejor está todavía por llegar. Por delante dos jornadas que servirán para encumbrar a un equipo y a un importante número de proyectos de futbolistas en un escaparate perfecto para desarrollar su talento.