El Ourense B supone el escollo a superar esta tarde por el Ribadumia en A Senra (17,45 horas). Será una nueva oportunidad para calibrar la tensión competitiva de un equipo aurinegro ante la que será una nueva defensa de su segunda posición.
El filial rojillo se presenta a priori como un rival asequible. Su tendencia a la baja queda patente en una única victoria en las últimas nueve jornadas. Por contra, los de Gabi Leis vienen de encadenar dos triunfos de manera consecutiva que les han servido para mantener su ventaja de tan solo un punto sobre un Pontellas muy presionante desde su tercera posición.
El triunfo en la eliminatoria de Copa Diputación ante el Rápido de Bahía (5-2) en la noche del jueves también ha servido de acicate para una plantilla que tiene muy claro que su principal objetivo pasa por conseguir el ascenso que ahora tienen en su mano a falta de seis jornadas.
Leis cuenta con todos sus efectivos disponibles a excepción de Yago Paz que continúa arrastrando molestias físicas. Josiño es duda por un traumatismo en un dedo del pie que no parecen poner en peligro su participación.
El Villalonga se desplaza a O Lourambal para medirse al Porriño (17,30 horas). Julián Ferreiro ha decidido despresurizar a su equipo tras obtener únicamente uno de los seis últimos puntos, "estamos a seis puntos de la segunda plaza y quedan seis partidos, pero cada vez que nos presionamos para ganar los partidos no nos fue bien. Vamos a Porriño a pensar en hacer un buen partido centrándonos únicamente en lo nuestro. Ya será el momento de analizar posibilidades después del partido".
Enfrente estará un Porriño cómodamente situado en la zona media con 44 puntos, pero el técnico celeste prefiere no reparar demasiado en el rival, "lo importante es hacer bien nuestras cosas. Hemos querido hablar solo durante la semana de nuestras capacidades para mejorar y volver a disfrutar compitiendo sin agobios por cazar a nadie".
La convocatoria celeste solo contará con la ausencia de Alberto por una fractura en una mano. Los dieciséis elegidos se decidirán en el propio vestuario del campo porriñés.
Por su parte, el Unión Grove tratará de ofrecer su mejor versión en Monte da Vila (17,15 horas), escenario al que llegará el Barco.
Los de Borja Burgos virtualmente descendidos, puesto que le separan diez puntos de la permanencia con solo 18 por disputarse, quiere aprovechar una fase del calendario ante rivales de la zona baja para despedir la temporada con las mejores sensaciones posibles. Los ourensanos, con 44 puntos, vienen con la intención de asegurar matemáticamente la permanencia.
