El Coruxo llega a la última jornada sin depender de si mismo para lograr la permanencia. La derrota de esta tarde en O Vao ante el Fuenlabrada (0-2) sitúa a los vigueses al borde del abismo a la Tercera División. El equipo que dirige Rafa Sáez necesita ganar en la última jornada en el campo del San Sebastián de los Reyes, que el Toledo pierda o empate frente al Fabril o que el Pontevedra caiga en el campo del Atlético de Madrid B.

Los verdes, impulsados por las urgencias de la clasificación, salieron hoy ante el Fuenlabrada como perros de presa. Pero la falta de pegada en los últimos metros y el saber estar del rival declinaron la balanza hacia el lado visitante. El equipo madrileño se mostró como un equipo serio, consciente de que podía esperar al Coruxo en su propio campo y matarlo a la contra. Así llegó el primer tanto del Fuenlabrada. Con el Coruxo volcado en la presión en campo contrario, encontraron una fisura y salieron disparados en transición. Hugo Fraile se encargó de culminar la jugada con su gol desde la frontal.

En la segunda mitad el Coruxo mantuvo el pulso, otra vez sin éxito. No consiguió crear ninguna ocasión clara para igualar el encuentro y el Fuenlabrada hizo la sentencia a veinte minutos del final a balón parado.