Abel Caballero presentó ayer la nueva edición de la San Silvestre viguesa, que se celebra el 31 de diciembre a las 17.00 horas, acompañado por representantes de los patrocinadores privados (Gadis, Hyupersa, Máis que Auga, Frutas Neves, Decathlon y Coca-Cola), la atleta Soledad Castro (Comesaña) y el Concejal de Deportes, Manel Fernández. El alcalde ha marcado el reto de "ir a por los 10.000 participantes" tras el éxito logrado el año pasado, cuando fueron 8.000 los corredores que participaron en esta cita solidaria.

"Es una maravillosa forma festiva de acabar el año y será una gran celebración para despedir 2017", asegura Caballero, que recuerda que "es una carrera no competitiva, festiva y de cachondeo total", invitando a la ciudadanía a que acuda disfrazada. El Concello, que lidera el patrocinio y la organización, ha anunciado que habrá nueve cheques regalo de 1.200 euros para los mejores disfraces grupales, individuales e infantiles, además del sorteo de diversos productos.

Como sucedió en anteriores ediciones, los participantes, que se pueden inscribir desde hoy mismo de forma gratuita en la web www.championchipnorte.com, recibirán un gorro de Papá Noel antes de la prueba entregando alimentos no perecederos en el stand del Banco de Alimentos que se situará en la Alameda.

El alcalde comentó que "es la prueba que más participantes tiene de largo" entre las que se celebran en la ciudad, quedando a continuación la de Vigo contra el Cáncer, "con 2.000 o 3.000". Caballero cuantificó en 45 las pruebas atléticas que se organizan en Vigo entre las populares urbanas, las de cross y las de pista. Todas ellas se congregan para movilizar a unos 50.000 deportistas

Soledad Castro, atleta del Comesaña que se mantiene entre las mejores veteranas del país y a la que Caballero calificó de "excepcional", dijo que a ella en cada prueba "hay un nervio que me dice corre", pero celebró que se organicen estas pruebas no competitivas "para el que quiera pasar un día diferente".

Además, tanto el alcalde como Pedro Pereira, presidente de la ONG Banco de Alimentos de Vigo, apuntaron que el paso por la Alameda será el último con el actual empedrado, pues "estamos a punto de iniciar la reforma de todo esa entorno semipeatonal", explicó el político.

Este año la salida cambia de dirección. En lugar de correr directamente hacia el Casco Vello, los participantes irán hacia el Areal para dirigirse a García Barbón, que es la novedad respecto al año pasado. Se busca así una salida multitudinaria más espectacular, cómoda y rápida para los miles de corredores. Así, desde Areal se llegará a Serafín Avendaño para allí tomar García Barbón, Colón, Marqués de Valladares, Fermín Penzol (único tramo en subida), Praza da Constitución, Triunfo, Rúa Real (este año es en bajada para facilitar el paso de los corredores), Teófilo Llorente, Cánovas del Castillo, Concepción Arenal, una vuelta a la Alameda y llegada a meta.