El titulo de liga de División de Honor Femenina se decidirá en la última jornada tras las victorias en el día de ayer del Mecalia Guardés y el Super Amara Bera Bera. Un solo punto separa a las gallegas del título. El sábado A Sangriña vivirá una jornada única en su historia.

A pesar de la victoria final las jugadoras del Mecalia Guardés salieron muy presionadas por lo que estaba en juego lo que permitió que el Canyamelar Valencia llevara el ritmo del partido y le costara mucho al conjunto gallego abrir brecha en el marcador. En el minuto veinte habían conseguido una renta de cuatro goles lo que hacía soñar pero un bajón en el juego ofensivo permitió al Canyamelar realizar un parcial de 4-1 dejando el marcador en un preocupante 10-11 a falta de cinco minutos para el intermedio. Las jugadoras de Prades supieron reponerse y se fueron al descanso con ventaja de dos goles.

El discurso de Jose Ignacio Prades en el descanso surtió el efecto deseado ya que el encuentro cambió por completo. La defensa del Mecalia Guardes se convirtió en un muro y la aportación de la portería fue fundamental para que solo encajaran cinco goles en los segundos treinta minutos de partido. Poco a poco la ventaja en el marcador iba siendo superior, el entrenador de las valencianas pedía tiempo muerto para frenar a su rival pero no sirvió de nada. En el minuto quince de partido con un parcial de 0-5 el Mecalia Guardés consiguió la máxima ventaja del partido (diez goles) 12-22.

Los último diez minutos de partido fueron de trámite para ambos equipos, que lo único que querían es que se acabara cuanto antes.

La próxima semana el Mecalia Guardés jugará la última jornada en casa frente al KH 7 Granollers, al que venció en la Copa de la Reina de gol de falta directa con el tiempo parado. A las de Prades les valdrá el empate para conseguir el título de liga o hacer el mismo resultado que el Super Amara Bera Bera, que ayer ganó de un solo gol al Zuazo y jugará en León.