Eliminatoria "complicada". Con esa sensación ha acogido el Celta el emparejamiento con el Shakhtar en el sorteo celebrado ayer en Nyon, donde el club vigués estuvo representado por Borja Oubiña.

El goleador céltico Iago Aspas recordó que en el sorteo se dio lo que no deseaba y de lo que había advertido el domingo: "Es un rival muy difícil, que ha ganado los seis partidos de su grupo de la UEL. Ya dije ayer que para mí tanto el Zenit como el Shakhtar eran de los rivales más difíciles. Va a suponer un duro rival y las condiciones climatológicas allí en febrero no creo que sean de las mejores. Conseguir un buen resultado aquí será importante para pasar la eliminatoria", dijo el moañés.

Oubiña tampoco escatimó elogios hacia el conjunto ucraniano: "Nos tocó un equipo de mucho nivel futbolístico y, a mayores, con un viaje largo. Lo más complicado es el rival, un equipo muy competitivo, que ha ganado todos los partidos en la fase de grupos. Tiene bastantes brasileños, que le dan ese punto de calidad. Es un equipo muy complicado pero el Celta siempre ha demostrado que sabe competir contra cualquier rival". Sobre la sede del partido de vuelta en Ucrania, Oubiña dijo: "Antes del sorteo nos comentaron que se había aprobado la sede de Lviv, pero están pendientes de darle en enero el visto bueno al estadio".

El director deportivo del Celta, Felipe Miñambres, destacó el nivel del rival europeo: "Nos ha tocado uno de los equipos más difíciles, que ha ganado todos los partidos de la fase de grupos. Vamos a enfrentarnos a un gran rival, que tiene mucho talento individual. Es un equipo con mucho desequilibrio y trataremos de llevarlos, me imagino, a un ritmo de partido que les resulte difícil imponer su individualidad. Vamos a tratar de imponer nuestro estilo, nuestro fútbol".