El Alondras sigue sin reaccionar y suma a su lista otra jornada más, la quinta, sin conocer la victoria y sin dar muchos síntomas de recuperación. Visitaba O Morrazo un Ribadumia que, sin hacer grandes cosas, pudo llevarse el partido, ya que dispuso de las mejores ocasiones, llegando a estrellar incluso tres balones en los palos.
Los alondrista afrontaban el encuentro sin un nueve puro, teniendo que recurrir a Mauro como hombre más adelantado. Más soltura con el balón mostraron los visitantes que pecaron de exceso de ambición y se mostaron poco dados a presionar a su rival, apostando más por replegar y mantener el control en facetas defensivas.
En el inicio del encuentro, dos balones a la espalda de la zaga forastera no pudieron ser aprovechados por Mauro, que no supo resolver dos despistes de su rival. Poco más hicieron los hombres de Duarte, al menos en la primera mitad.
El Ribadumia se fue acercando por momentos aislados a zonas ofensivas, disponiendo de dos buenos cabezazos Mou; uno de ellos llegando a golpear el palo izquierdo y pasearse por la línea hasta golpear el derecho.
Otro recurso para el Ribadumia fueron los lanzamientos a balón parado. Rozando el minuto cuarenta y cinco Anxo estrellaba otro balón a la madera. El mismo jugador,ya en la segunda mitad, volvía a probar suerte, con el mismo resultado, estrellando el esférico esta vez en el larguero.
Entrando en los minutos finales, el Ribadumia tampoco quiso arriesgar mucho y al menos no salir derrotado de Cangas ante un Alondras con pocos recursos para hacer daño en ataque. En el tiempo añadido, los de O Salnés desperdiciaron dos claras ocasiones, primero Agus en un mano a mano que desviaba Martín a córner; y tras un el saque de esquina, que Bugallo remataba en el primer palo, sacando un defensor casi en la línea de gol.
El Ribadumia intentó sacar provecho en esos últimos instantes finales de su superioridad numérica por la expulsión de Mauro, pero sin embargo careció de acierto cara puerta, firmando un empate a cero en el electrónico.
El Alondras sigue manteniendo una ventaja de solamente dos puntos respecto a la zona de descenso. Es 14º, con 18 puntos, mientras que su rival, el Ribadumia, es undécimo, con 23 puntos, aunque no debe despistarse porque la zona baja de la tabla está muy apretada. Compostela y Silva, ambos con 22 puntos, le pisan los talones.
