Partido que a priori se presentaba muy difícil, ya que se enfrentaban los líderes contra el penúltimo. Pero esta temporada la igualdad entre todos los equipos es grande. Los dos contendientes ofrecieron un juego vistoso por momentos, con victoria épica del Vigo.

El encuentro comenzó con diferencias pequeñas en el marcador pero siempre a favor de los visitantes. Los locales cometían demasiados fallos, tanto en recepción como en saque, y por ello ffueron siempre a remolque en el marcador en el primer set. En el segundo, los de Penedo llegaron a ponerse 16-13. El San Sadurniño firmó un parcial de 0-6. Volvió a reaccionar el Vigo hasta el empate a 22 y ahí se impuso la veteranía visitante.

Con cero a dos en el marcador y jugando contra el líder todos los aficionados esperaban que el resultado final fuese claramente para el casillero de los de Ferrolterra. Los locales sacaron a relucir su garra y se llevaron el tercer set para los locales por un apretado 25-21.

El cuarto set fue muy parecido a los dos primeros salvo que después del empate a 11 fueron los vigueses los que se adelantaron en el marcador con una renta escasa, de dos puntos, pero que gestionaron.

El quinto set, considerado el de la suerte, es el que marcó las diferencias en el encuentro. Los visitantes, más enteros y con mucha más experiencia, llegaron a ponerse de hasta tres puntos por delante 4-7. Pero esa diferencia no les bastó ya que los locales querían el triunfo y consiguieron empatar el set a 10. A partir de ese momento se desataron con un gran trabajo en defensa y en bloqueo que terminó por vencer al conjunto visitante en todas las facetas del juego.

Alegría final en las filas locales y resignación en las visitantes por salir derrotados de un encuentro que tenían muy bien encarrilado desde el comienzo pero que no supieron cerrar.