Hugo Mallo ha madurado sobre el escenario. Debutó con el primer equipo a los 19 años y a sus recientes 25, pese a varias lesiones graves, acumula más de 200 partidos con la casaca celeste. De Augusto Fernández heredó la capitanía, que ejerce en la cancha, el vestuario y la sala de prensa. Aquel chico de respuesta escasa ha dado paso al del discurso enérgico.

desde niño. Mallo vivió como niño las glorias europeas del Celta, que él quería imitar. "Es un sueño que se puede hacer realidad", dice del debut ante el Standard, pendiente de si le afectarán las rotaciones de Berizzo. "Todos los chavales queremos disfrutarlo y aprovecharlo. Será una experiencia bonita, que no olvidaremos en nuestra carrera".

prioridades. "No hemos empezado de la mejor manera, es obvio", constata. "Estamos muy dolidos. Pero tenemos la revancha este jueves. Aunque no sea Liga, queremos ganar, cambiar la dinámica y luego pensar en Pamplona". Y aunque pronuncie el inevitable "vamos partido a partido, sea la competición que sea", se le escapa una cierta jerarquización de prioridades: "Queremos ganar el jueves pero sobre todo en Pamplona para que nos cambie este sabor de boca". Aclara que la cita europea "no molesta. Quiero jugar el jueves, cuanto antes, para que nos saquemos esta sensación mala que tenemos después del partido contra el Atlético de Madrid. La UEFA tiene que ser una ayuda, una motivación para reencontrarnos con nuestro juego".

rotaciones. El partido en Lieja comenzará a desvelar qué sistema aplicará Berizzo en el reparto de esfuerzos. "Soy partidario de salir a ganar en cada partido. Somos el Celta. Tenemos una plantilla amplia", analiza Mallo. "Se han fichado jugadores nuevos y todos estamos a disposición del mister, que es el que decide qué perfil de jugador quiere para cada partido. Es su elección".

standard. El cuerpo técnico ya ha transmitido a la plantilla su análisis sobre el Standard, que Mallo resume: "Tienen dos bandas rápidas, un delantero grande y un mediapunta pequeño que juegan bien y el otro día hicieron presión alta. Tenemos que estar juntitos y atentos". El cambio de entrenador en las filas rivales tiene una doble lectura: "Los jugadores siempre están más predispuestos a lo que el entrenador pide, más revolucionados. Intentaremos aprovecharnos de la situación".

autocrítica. El lateral es positivo en su relato, pero sin negar los pecados cometidos. "Debemos quedarnos con la cara buena, ante el Real Madrid y en la primera parte ante el Atlético. Es la línea a seguir. La cara mala tenemos que mejorarla, que cada uno reflexione. A día de hoy no hemos rendido conforme a lo que todo el mundo espera. La línea es seguir trabajando y creer en uno mismo, en el equipo, en todos".

físico y actitud. "Al final el partido se nos hizo algo largo", explica sobre el derrumbe del pasado sábado tras el 0-1. "El Atlético no es un equipo de regional sino de los potentes de Europa. Aguantar esa exigencia con el resultado en contra y delante de estos jugadores se vuelve muy complicado. Independientemente del rival, es una cosa del equipo, del jugador, de toda la plantilla. No podemos bajar los brazos en ningún momento. También nos costó en algún partido de la pasada temporada. Esperamos mejorarlo rápido". Atribuye ciertos defectos a lo propio de un inicio. "Siempre hay matices por mejorar, situaciones que volver a vivir. Eso nos lo dará el paso de los partidos. Estoy tranquilo. El equipo está haciendo un buen trabajo y se verá un gran Celta, que todos disfrutaremos". Niega que fallen el físico o la actitud: "El físico se puede mejorar. Si fuese actitud, estaríamos dolidos. Pero yo no veo falta de actitud en el equipo, en ningún jugador. No creo que sea ni físico ni actitud".

afición. Balaídos, pese a la lluvia real y la de goles colchoneros, concluyó el partido cantando "Celta, alé". "Lo hemos notado", asegura Mallo. "La sensación es de rabia. Ves a la gente mojándose el otro día, con 0-4, y seguían animando. Y nosotros estábamos bloqueados. No éramos capaces de dar dos pases. Nos duele por nosotros mismos y sobre todo por la gente, que vemos que está de nuestro lado. Lo agradecemos y nos viene genial. Por eso nos duele no devolvérselo".

Permanencia. El marinense acepta que Berizzo fije el horizonte liguero en los 40 puntos necesarios para la permanencia. "El mono (de trabajo) hay que ponérselo siempre. Es cierto que con las competiciones que tenemos nos puede costar un poco más. Son muchos partidos. Somos una plantilla amplia, que puede disputar las tres competiciones, pero la prioridad es la Liga. El primer objetivo es la salvación".

Preparación. El Celta acostumbraba a avasallar físicamente a sus adversarios en las primeras semanas de competición. Mallo niega que el diseño de la pretemporada variase por culpa de la Europa League. "Lo único que hemos notado son los viajes. Se ha trabajado igual que los otros años. No es excusa. Creo que hemos hecho un gran trabajo en pretemporada, hemos jugado bastantes partidos, nos encontrábamos bien. Pero al final tienes un rival delante, que te exige, y no hemos sido capaces de estar a la altura". Esa mención a los viajes entronca con aquella crítica de Mallo a la disputa del derbi en Uruguay. El capitán prefiere interrumpir esta línea argumental: "Al final somos profesionales, tenemos que ir a jugar a donde nos manden y hasta nos viene bien. Este año vamos a estar viajando bastante. Fenomenal".

meta europea. Mallo no renuncia a cruzar esa frontera europea que sus ídolos fijaron en cuartos de final: "Estamos en un grupo complicado, pero creo que podemos dar un gran paso. Veo opciones de clasificarnos, la verdad. Pero con los pies en el suelo. Empezamos el jueves, ganar y poco a poco". Pero sí niega cualquier etiqueta de favorito y que el Standard sea la ceniciente del grupo: "Por liga, a lo mejor, puede ser. Pero no creo que haya una cenicienta. Y si la hay, en tal caso, somos nosotros porque llevamos diez años sin jugar la UEFA. El Standard está más acostumbrado que nosotros a competiciones europeas".