El entrenador del Celta, Eduardo Berizzo, aseguró después del empate contra el Espanyol en Cornellà-El Prat que su equipo tuvo que "administrar mejor la ventaja tras el 0-1" y no lo logró, el rival los "arrinconó" y "encontró el gol".

El técnico argentino reconoció que, por momentos, el choque se convirtió en un intercambio de golpes. "Se volvió "un ida y vuelta, a las contras", y no es el "tipo de partido" del Celta, dijo.

"Fue un encuentro muy disputado y el ritmo físico fue muy alto y nos pasó factura al final para encontrar el último pase", agregó.

De todos modos, destacó el punto: "Siempre es bueno sumar, lo dije antes y me reafirmo. De tres en tres estaríamos más contentos, pero el punto sirve. No tuvimos la tranquilidad en ataque que nos hubiera dado el gol, el Espanyol reaccionó y el duelo volvió al origen".

Berizzo insistió en que no tienen tiempo de pensar en posibles puntos perdidos en Cornellà-El Prat. "Vamos en una carrera que nos exige sumar y a pensar en el lunes que viene", aseveró.

Por otra parte, el técnico explicó su decisión de mantener en el campo a Tucu Hernández. "Es muy importante para nosotros y su ausencia nos habría debilitado. No quería mermar nuestro juego aéreo", afirmó.