Quino Salvo (Vigo, 1958) es un hombre fuerte, un amante del baloncesto al cual ha dado su vida, es de esas personas que dejan huella y arrancan una sonrisa. Salvo en su época de jugador pasó por clubs como Helio Skol Zaragoza, el Fórum Filatélico de Valladolid y el Caja San Fernando. De entrenador pasó por clubes como Cantabria Lobos, Ciudad de Huelva y dos equipos gallegos.

El último equipo donde fue entrenador fue, precisamente, en uno de su comunidad autónoma natal, el Marín Peixe Gallego, que militaba en la liga EBA, dónde en tres temporadas consiguió dos segundos puestos consecutivos. Entrenó al ya desaparecido Gestibérica Vigo anteriormente, en la LEB Plata en la temporada 2006-07.

Ahora, en un trance complicado, el mundo del deporte se ha volcado con él. El vigués ha sido operado de un tumor cerebral y recibe tratamiento en un centro hospitalario de Vigo. En Valladolid los distintos equipos deportivos de la ciudad han intentado ayudarle para echarle una mano en esta batalla que libra ahora. Mike Hansen, presidente del CBC Valladolid, buscó todos los apoyos de cara a homenajear al exjugador en el descanso del partido con Aceitunas Fragata Morón.

Allí estaba todo el mundo para darle su apoyo, desde representantes políticos como Óscar Puente y León de la Riva, alcalde y exalcalde de Valladolid, respectivamente, a exjugadores y amigos como Juan Antonio Corbalán, Alfonso Reyes y Josep María Margall.

Los vallisoletanos, además, pudieron brindarle una victoria a su exjugador (78-76), en un partido duro que se decidió en los últimos instantes. En el descanso, el pabellón se hizo uno para alabar a su ídolo. El alcalde de Valladolid le obsequió con una placa conmemorativa de tan emotivo homenaje, y el club, con una gran imagen de sus tiempos de su jugador.

Al cariño que le dieron los vallisoletanos en el descanso del partido se unieron otros equipos como el Blusense Obradoiro o el CB Sevilla, además del Ayuntamiento de Valladolid, el cual no quiso faltar a la cita.

Además del homenaje del CBC Valladolid, Quino Salvo realizó también el saque de honor en el partido del Real Valladolid y la Ponferradina.

Después del partido de baloncesto hubo una comida para recaudar fondos para ayudarle en la financiación de su tratamiento.