La crisis se ha instalado de nuevo en Valencia. Los tiempos ya no son felices en Mestalla. Ese estado idílico sólo ha durado doce meses, un período en el que el proyecto que encabeza Peter Lim ha devuelto a los chés a disputar la Champions League. Los problemas de Nuno con Negredo, la marcha de Otamendi y el proceso de adaptación de refuerzos como Santi Mina o Santos han terminado por desquiciar a un valencianismo que reclama día sí y día también la destitución del técnico portugués.

Vigo se antoja como un partido determinante en el proyecto del preparador luso. El Valencia desembarca en Balaídos tras perder en Gante y encontrarse a años luz de aquel equipo intenso y vertical que finalizó cuarto el pasado curso. Nuno no da con la tecla. La propuesta que puede presentar ante el Celta no está clara, aunque se prevé que apueste por un 4-3-3 en el que la clave estará en la medular que formarán André Gomes, Dani Parejo y Javi Fuego. Superar esa línea será determinante para que los de Berizzo se reencuentren con el triunfo ante su afición.

Sobre el resto del equipo preocupa la presencia de Feghouli. El argelino es el hombre más en forma de este Valencia. Es el que, por ejemplo, está sosteniendo a los chés en la Champions League. Llega tocado físicamente, por lo que Santi Mina podría ocupar su lugar en la banda derecha. En el otro extremo Bakkali y Piatti pugnan por la otra plaza de una tripleta que tendrá al siempre peligroso Paco Alcácer como referencia ofensiva. En defensa la única duda reside en el lateral derecho, una plaza por la que pugnan Cancelo y el exdeportivista Barragán.

Más allá de la solidez de su sala de máquinas, este Valencia intentará explotar sus bandas. Sus extremos, como comentábamos, podrán a prueba a Hugo Mallo y Jonny. Los dos canteranos necesitarán ayudas atrás para frenar, además, las subidas de los laterales valencianistas (sobre todo en el caso de Gayá).

Por lo demás, el club que preside Peter Lim llega con la baja de Enzo Pérez por sanción. El cuadro ché también llega mermado por otras ausencias de larga duración como son la de Abdennour (el hombre llamado a cubrir la marcha de Otamendi), el excéltico Rodrigo o el guardameta Diego Alves. No obstante, el relevo del portero brasileño, el caterano Domenech, es la gran noticia de un Valencia que es el tercer conjunto menos goleado de la Liga gracias al espectacular rendimiento que está ofreciendo este arquero que ha dejado sin opciones a Yoel Rodríguez.

En definitiva, el Valencia vivirá en Balaídos su particular "match-ball". Una derrota supondría una estocada no sólo al proyecto de Nuno, sino que la brecha con los puestos de Champions League se iría a los ocho puntos en caso de que el Atlético de Madrid ganase esta jornada. El rendimiento del cuadro ché lejos de Mestalla invita al optimismo céltico. De momento sólo un empate (en Vallecas) y un triunfo ´in extemis´ (en El Molinón) conforman el botín de este Valencia que no sé si sabe si ha tocado fondo.

Posible alineación:

Domenech; Cancelo, Mustafi, Santos, Gayá; Javi Fuego, Dani Parejo, André Gomes; Feghouli, Bakkali y Paco Alcácer.