El Club Vigo mantiene intactas sus opciones de ascenso tras su brillante triunfo en Castellón, una cancha en la que había perdido en sus dos últimas visitas.

Además, en la noche del jueves el jugador vigués Jorge Silva recibió la triste noticia del fallecimiento de su hermano en accidente de coche y salió a primera hora del viernes a Caracas. Era una baja importante ya que desde su llegada había participado de manera muy activa en los tres encuentros que pudo jugar. Pero lejos de venirse abajo, los vigueses dieron un gran paso hacia el objetivo final en Castellón. Además, el Almoradí venció al Cajasol por 3-0 lo que significa que los vigueses siguen segundos, a un solo punto de los primeros y con la ventaja añadida de que los dos últimos encuentros se disputarán en Vigo.

El primer set ya comenzó con ventajas de los vigueses. Después de varios balones atacados con fuerza y dos balones bien bloqueados los vigueses se hicieron con el primer parcial.

No acostumbran los de Calafell a mantener el ritmo durante mucho tiempo pero aquí sabían lo que se estaban jugando y lógicamente no querían perder la oportunidad de ganar. No apareció la relajación y el set fue muy similar al anterior.

Ya tenían un punto en su casillero, pero no renunciaban a los tres puntos. El tercer set fue el más disputado y fueron los locales los que, con dos buenos ataques de su opuesto Bacci, terminaron por anotarse el parcial.

El cuarto set tendría que ser el de la victoria definitiva ya que Calafell no quería dejarse sorprender. Mientras los vigueses mantenían el ritmo y en algunas ocasiones lo aumentaban, los locales empezaban a venirse abajo, sobre todo viendo la superioridad del equipo visitante. El Club Vigo sumó así una gran victoria que le acerca más al ascenso.

El próximo fin de semana visita el pabellón de Coia el Almoradi, que ha perdido los tres encuentros que ha disputado esta temporada ante los olívicos. Un triunfo el próximo sábado (18.00 horas) situaría a los locales matemáticamente en la máxima categoría.