El concurso de ideas para la construcción de un puente para peatones y bicicletas sobre el río Miño, entre Tomiño y Vila Nova de Cerveira, ha abierto en el día de ayer su plazo de participación. Dicho plazo permanecerá abierto hasta el 23 de octubre de 2017 y uno de los criterios a tener en cuenta será la viabilidad económica de la ejecución del proyecto, que no deberá superar los 3.400.000 euros.

Según las bases publicadas en el BOPPO, el objetivo del concurso es seleccionar las tres mejores propuestas de estudio técnico para la futura construcción de un puente internacional entre los parques Espazo Fortaleza y Castelinho y cada uno de los proyectos ganadores recibirán una prima de participación de 9.000 euros. Posteriormente, las tres propuestas ganadoras serán invitadas a participar en la segunda fase, que consistirá en un procedimiento negociado sin publicidad para la contratación del servicio de redacción del anteproyecto del puente.

Podrán participar en esta convocatoria las empresas y profesionales, individualmente o en equipo, con la habilitación empresarial y profesional requerida en las bases, y es que debido a la complejidad e importancia del proyecto, se le exigen unos requisitos mínimos de solvencia como una trayectoria profesional en el campo del diseño estructural y en el desarrollo de puentes o pasarelas singulares. Además todos los trabajos deberán presentarse bajo lema para garantizar el anonimato de las propuestas hasta el fallo del jurado.

Otros de los criterios de valoración a tener en cuenta serán la funcionalidad y la calidad formal de la propuesta, en la que se tendrá en cuenta su originalidad y calidad plástica, atendiendo a la premisa de que el puente peatonal constituya un nuevo referente en el paisaje y que al mismo tiempo sea representativo de la hermandad entre Tomiño y Vila Nova de Cerveira.

Por último, también cabe recordar que este puente permitirá unir las áreas recreativas de los dos países creando un parque transfronterizo de gestión común con una superficie de 100.000 metros cuadrados, además de permitir la comunicación directa entre los dos núcleos urbanos, Goián-Tomiño y Villa Nueva de Cerveira, incrementado las relaciones sociales, culturales y comerciales existentes.