Los trabajos de recuperación de la senda fluvial del Tea, desde el casco urbano de Ponteareas hasta la parroquia de Padróns comenzaron la semana pasada después de llevar diez meses dañada, a causa de los temporales de enero y febrero. El gobierno ponteareano no inició su recuperación hasta tener el respaldo de un convenio firmado con la Xunta, que se rubricó el pasado 8 de septiembre. De este modo, los trabajos se realizarán en coordinación con los técnicos de la Consellería de Medio Ambiente y de la Confederación Hidrográfica (CHMS). Desde el gobierno local explican que su objetivo es "recuperar la senda en las zonas afectadas, pero con el máximo respeto a los valores naturales y medioambientales".

La reforma incluye dos cambios en el trazado de la senda, que se redireccionará en dos puntos por caminos tradicionales para corregir daños patrimoniales y medioambientales detectados en su recorrido inicial. Uno de esos desvíos estará a la altura del Castro da Croa, un yacimiento prerromano ubicado cerca del cauce, y el otro, ya en el tramo final, en la parroquia de Padróns.

Además, se retirarán parte de los materiales utilizados en la senda, como un tramo de pasamanos y otros elementos de madera , igual que el jabre colocado en su construcción inicial. Además, se nivelará la superficie en aquellas zonas donde la erosión por los desbordamientos ha sido más fuerte. Igualmente, será necesario segar los caminos tradicionales por los que transcurrirá la senda a partir de la reforma. Asimismo, se harán drenajes en algunos puntos para evitar empozamientos.

Por otro lado, se incorporarán 1.000 plantas de especies autóctonas y se retirará vegetación invasora a orillas del Tea. Las nuevas especies serán 300 fresnos, 200 abedules, 150 arces blancos, 100 robles y 50 alisos , hasta un total de un millar de árboles propios de la vegetación de ribera en el clima atlántico gallego.

El gobierno ponteareano espera haber acabado la parte más importante de la recuperación, financiada a través del convenio con la Xunta, en las próximas semanas, "para que pueda ser disfrutado y utilizado con seguridad por los cientos de vecinos que usan la senda".

No obstante, las mejoras más urgentes estarán acabadas en unas semanas pero, otras, para las que las lluvias serían perjudiciales, no se ejecutarán hasta primavera. Una vez concluidos los trabajos, el nuevo trazado volverá a señalizarse.

Respecto a la ampliación de la senda del Tea hasta la parroquia de Fozara, el gobierno ponteareano estima poder ejecutarla a finales de este invierno.