La abstención de ACIP impidió que saliese adelante en el pleno la moción socialista que pedía la reprobación del alcalde ponteareano, Salvador González Solla, por haber realizado obras en varios elementos en la parcela de su casa, en Ribadetea, sin contar con las licencias pertinentes para los trabajos ejecutados. En la misma moción, el PSOE pedía crear una comisión de seguimiento para supervisar el expediente de reposición de la legalidad de esas obras. PSOE y BNG votaron a favor pero los votos en contra del PP fueron suficientes para echarla abajo al abstenerse el grupo de Juan Carlos G. Carrera.

Ya en el pleno de diciembre, el BNG había pedido explicaciones al alcalde por estas obras y el regidor había argumentado que creía que las tres licencias que había pedido cubrían todos los trabajos.