El Real Madrid no se conformó con llevarse una victoria de Balaídos, afeada por la parcial actuación del colegiado valenciano Martínez Munuera. Algunos jugadores como Cristiano Ronaldo acusaron a compañeros del Celta de aceptar primas de terceros equipos si ganaban un partido en el que apenas se jugaban mejorar un par de posiciones en la clasificación general de la Liga. Las denuncias del futbolista portugués fueron recogidas por las cámaras de televisión

Según MinutoCero de Movistar, que basaba su información en imágenes captadas por las cámaras de televisión, el portugués mantuvo una acalorada discusión con Gustavo Cabral durante el partido del pasado miércoles en Balaídos. En la conversación, según el citado medio, CR7 exclamó: "¡Dinero, tú mucho... maletín!", mientras con las manos componía el gesto de transportar un maletín. Además, el astro luso se frotaba los dedos de una mano para reproducir el inconfundible gesto del dinero. En las imágenes aludidas, el argentino Cabral no aparece en el plano, pese a ser el destinatario de las palabras de Cristiano Ronaldo.

Las sospechas de que el Celta pudiese estar primado para ganarle al Real Madrid, que disputa el título de Liga con el Barcelona, surgieron días antes de la cita de Balaídos desde un sector de la prensa madrileña. Eduardo Inda llegó a señalar en un programa de televisión que el Celta "tenía tres millones de razones" para querer ganar ese partido que se había suspendido a principios de febrero por los destrozos causados en la cubierta de la grada de Río por el temporal.

Cristiano Ronaldo abrió el marcador en el minuto 9. En el 38, el árbitro no señaló una mano de Varane en el límite de su área. Aspas se llevó una tarjeta amarilla por protestar. El moañés fue arrollado por Ramos a la hora de juego y Martínez Munuera le mostró la segunda cartulina por entender que simulaba un penalti.

A pesar de jugar con diez, el Celta anotó el 1-2 con un disparo de Guidetti que desvió Ramos. El Real Madrid aprovechó la inferioridad numérica del rival para sentenciar el partido, con goles de Benzema y de Kroos.

Sin embargo, a los jugadores de Zinedine Zidane no les pareció suficiente el botín que se llevaban de Vigo, con tres puntos que pueden suponerle el título de Liga. Sergio Ramos se mofó de un sector de la afición y Cristiano Ronaldo dedicó a Cabral gestos acusatorios de que habían vendido su alma al diablo por unas monedas.

El Mundo, ayer, incidía en el temaEl Mundo: "Al vestuario blanco le llegó un susurro del contrario: 200.000 euros por cabeza habrían tenido de incentivo los jugadores celestes. ¿Verdad? ¿Chivatazo provocador? En el autobús blanco camino del aeropuerto no se hablaba de otra cosa". Podían haber analizado la actuación del árbitro.