En algunos periódicos donde todavía se cuenta la verdad de lo que ocurre en nuestra destrozada España, abrieron su portada con la escalofriante noticia de que el número de mujeres que han abortado en 2008 han sido 115.812, o sea un 3,2% más que el año anterior. De ellas 10.221 eran menores entre 15 y 18 años, según informa el Ministerio de Sanidad.

Ante el drama que han vivido estas mujeres que se han visto obligadas a tomar esta decisión porque no han recibido apoyo por parte del Estado ni de la sociedad, que las ha dejado abandonadas, sin encontrar ayuda de ninguna clase por parte de la administración. 115.812 mujeres que sufrirán las consecuencias físicas y psíquicas del aborto, de que no se habla.

Han sido 115.812 ingresos en las arcas de las empresas abortistas, que año tras año ven aumentar sus ingresos.

¿Es este el progreso del que tanto habla el Gobierno de Zapatero? El gran progreso humano sería proteger tanto a la madre económicamente y socialmente como al hijo engendrado, por el bien de ambos y por el bien de la sociedad.

Pero no, Trinidad Jiménez, Ministra de Sanidad tan contenta con estos datos, porque dice que reflejan el buen quehacer del Gobierno en esta materia. ¿Cómo es posible que nos estemos dejando engañar con mentiras, eufemismos y estrategias de este calado?

Le recuerdo a la señora Jiménez que los que pusieron en práctica los abortos fueron siempre los fascistas, comunistas y totalitarios en Alemania, Rusia, China, etc. ¡Y fracasaron!