Somos un colectivo de quince padres que tienen a sus hijos matriculados, en este curso, en la jornada de tarde de la Escola Infantil Costeira de Saiáns. Esta jornada no es compatible con nuestro horario laboral, pero nuestros hijos no entraron en el turno de mañana por falta de plazas o por nacer después del período de matrícula. Ante esto, se nos ofrece por parte del Servicio Municipal de Educación, asistir en jornada de tarde y solicitar el cambio a la mañana para el curso 2009/10, tal y como se venía haciendo en años anteriores. Aceptamos esto con vistas a solucionar nuestro problema el curso que viene, cumpliendo todos con las condiciones impuestas que son asistir diariamente y pagar las cuotas, a pesar de no necesitar este servicio de tarde y no pudiendo disfrutar en nuestro tiempo libre de nuestros hijos.

Cual es nuestra sorpresa, cuando a principios de abril se nos comunica a los padres que cambian las normas de matriculación y no podremos solicitar el cambio al turno de mañana con la nueva matrícula, no reconociendo los derechos de ser alumnos de dicha escuela, teniendo que presentar una nueva matrícula en las mismas condiciones que otros niños ajenos a la escuela.

Con esta medida pretenden que las guarderías cumplan una función social, con lo cual, las familias trabajadoras, convencionales y que cuidamos de nuestros hijos, no tenemos derecho a una plaza en una guardería pública, pero sí tenemos derecho a trabajar y obligación de pagar impuestos, sin ninguna contraprestación a cambio. A este problema se suma que en el momento que nos lo comunican ya están cerrados los plazos de matrícula de otras guarderías públicas y en las privadas de la zona ya no quedan plazas. Después de diversas conversaciones con responsables del Servicio Municipal de Educación, entre ellos la concejala, se comprometen a reunirse, hablar el tema y darnos una respuesta, la cual todavía estamos esperando, con lo cual nos vemos con nuestros hijos en la calle para el curso que viene.

Con esto, sólo queda aclarar que poco les importa a nuestros dirigentes la conciliación laboral y familiar, el apoyo a las madres trabajadoras y las ayudas a las familias con hijos, temas tan de moda, pero que por desgracia cayeron en el olvido de sus programas electorales.