Cristóbal Balenciaga creó una escuela inimitable, pero escuela al fin y al cabo. Hoy, cien años después de la apertura de su primera tienda, ubicada en San Sebastián, el estilo del maestro arrasa en el mundo y es tomado como referencia por los grandes nombres de la moda, empezando por las creaciones de la firma que aún lleva el nombre del genio guipuzcoano.
Con motivo del aniversario de aquel primer local, el museo dedicado al modisto, con sede en Guetaria, su localidad natal, ha organizado una programación especial que incluye una gran exposición con el legado de una de sus mejores clientas, la millonaria Rachel Mellon.
El aniversario coincide también con los 80 años de la apertura de Balenciaga en París, donde esta primavera el Palais Galliera celebrará también otra muestra, al igual que hará por las mismas fechas el Museo Victoria & Albert de Londres, donde a Balenciaga se le venera como a una divinidad.