La primavera es época de cambios bruscos. Es su rasgo más característico. El calor puede dar paso al frío de un día para otro, y viceversa, y a un día de playa puede sucederle otro de tormenta, y de nuevo al revés. Sin embargo, si hubiera que apostar por qué prendas meter en la maleta, según los pronósticos a día de hoy, la ropa de abrigo ganaría a la de la playa en todo el país, por increíble que parezca mirando los valores que marcan los termómetros.

El buen tiempo aún se prolongará aún unos días más. De esta forma, la Semana Santa, arrancará con tiempo anticiclónico en Galicia, con un Domingo de Ramos en el que se espera que las temperaturas máximas alcancen los 24 grados centígrados en Pontevedra y Ourense, y 23º C en Vigo.