Más que indignadas y decepcionadas. Así se sienten dos vecinas del edificio que se levanta en el número 23 de la céntrica calle López de Neira, a pocos metros de Príncipe, que lamentan la inacción de la constructora Oreco Balgón y la promotora Barcial Inversiones, principales responsables del proyecto de rehabilitación del Círculo Católico de Obreros, en la esquina con Doutor Cadaval, donde se alumbrarán viviendas, garajes y locales comerciales. Denuncian que la obra les ha provocado en sus hogares numerosos desperfectos: grietas en las paredes que permiten ver la calle, tablillas de madera del suelo separadas y levantadas o marcos desplazados que impiden cerrar bien las puertas.