Una aseguradora reclama judicialmente a un vecino de Porriño que devuelva los 400.000 euros que fueron consignados a su nombre como indemnización de un grave accidente de tráfico que sufrió en 2004, tras una primera sentencia del Juzgado de Instancia 8 de Vigo, que fue recurrida y anulada después por la Audiencia de Pontevedra. El hombre fue advertido de que se trataba de una ejecución provisional, que la sentencia no era firme y que tendría que reponer el dinero si finalmente, como ocurrió, la Justicia no le daba la razón.

El hombre, su mujer y su hija se sentaron ayer en el Juzgado de Penal 3 acusados de un delito de alzamiento de bienes, pues en 2010 el matrimonio se divorció y la casa familiar pasó a su mujer y un 10% a su hija, que era quien le cuidaba dadas las graves secuelas que padece desde el accidente, tanto físicas como mentales. Este reparto de bienes impide embargar la vivienda a la aseguradora, pues el hombre asegura que dilapidó todo el dinero que retiró y vive bajo los efectos de la morfina y los antidepresivos.

La Fiscalía retiró los cargos, mientras que la acusación particular ejercitada por la aseguradora solicita penas de 3 años y medio para cada uno. Las defensas pidieron la absolución.