La masacre de trece personas en una fiesta en Veracruz ha aumentado la tensión en ese estado mexicano, uno de los que ha sufrido en mayor medida la escalada de violencia en el país por ser centro de disputa de carteles de la droga.

Trece personas -cinco mujeres, un niño y siete hombres- fallecieron el viernes por el ataque de un grupo armado durante una fiesta privada y familiar en un restaurante de la localidad petrolera de Minatitlán, según informaron las autoridades locales. Las primeras investigaciones del crimen revelaron que el grupo armado buscaba a una transexual que era gerente de un local nocturno. Entre las trece víctimas se encuentra el propietario del restaurante donde ocurrió el suceso, y la transexual "Becky".