Será este próximo 22 de marzo cuando el hijo menor de Manuel Alonso Rivas, el octogenario muerto a golpes en la parroquia viguesa de Sárdoma, deberá comparecer en el Juzgado de Instrucción número 8 de Vigo. Hasta allí será trasladado desde prisión, donde permanece por el crimen, que presuntamente cometió en un momento de arrebato tras una disputa familiar. Con el secreto de sumario ya levantado, la Fiscalía le comunicará la imputación y es probable que se pida la práctica de nuevas diligencias.
El magistrado sigue a la espera de informes de interés para la causa. Uno de ellos es el definitivo de la autopsia -se completará cuando lleguen todos los análisis de Madrid- y también se practicaron periciales policiales en busca por ejemplo de huellas u otros vestigios. La víctima presentaba al menos tres traumatismos craneoencefálicos, productos por los golpes que recibió con un objeto contundente. Otra lesión en la zona del tórax sería producto de la caída.
