Durante años les pareció un negocio redondo, pero se frustró cuando la víctima recibió una notificación de embargo del Concello de Vigo. El dueño de un taller de reparación de automóviles de la ciudad olívica y también agente de seguros que gestionaba la cobertura y gestión de multas de tráfico, utilizó al menos durante cinco años los datos de una antigua clienta para librar a otros de las sanciones de tráfico. Así, presentaba en el Concello impresos en los que identificaba falsamente como conductora a la mujer, que desde 2009 ya no residía en la ciudad.

El dueño del taller José Carlos P.P., su mujer Beatriz F.F., y dos de los beneficiarios Celia F.P. y José Antonio C.P. comparecieron ayer por la mañana en el Juzgado de lo Penal 1 para firmar un acuerdo de conformidad que se salda con penas mínimas tras confesar la tentativa de estafa.

El cabecilla de la trama aceptó la pena de 5 meses de prisión, su mujer cuatro meses y 3 meses Celia F.P., mientras que el cuarto acusado se conformó con una multa de 25 días con una cuota diaria de 6 euros. El matrimonio no tendrá que ingresar en la cárcel porque la pena se ha suspendido dado que carecían de antecedentes penales y no hay responsabilidad civil, mientras que los 3 meses de la otra acusada se sustituyen por una multa de seis meses con una cuota diaria de 6 euros (930 euros).

En total, la Fiscalía detectó un total de 17 expedientes en el Concello de Vigo, entre enero de 2011 y marzo de 2016, en los que se dieron falsamente los datos de la antigua clienta del taller. En todos, salvo en dos, las notificaciones de las multas a la perjudicada se efectuaron por edictos, dado que ya no residía en Vigo, y al no ser atendidos se inició la vía de apremio contra ella, notificada igualmente por edictos.

La perjudicada se enteró de lo que ocurría cuando le notificaron las diligencias de embargos, por lo que en octubre de 2016 presentó alegaciones y dio lugar a la paralización del procedimiento de apremio por parte del Concello de Vigo al tener sospechas de que podría haber sido identificada irregularmente como conductora de los vehículos infractores.

Dos de las multas, con fecha del mes de marzo de 2016, fueron notificadas personalmente a la mujer que presentó las correspondientes alegaciones y el Concello archivó su expediente y sancionó a los titulares de los vehículos infractores. En concreto les impuso 900 euros a cada por haber identificado de forma no veraz al conductor del turismo. Las multas impuestas a otros 15 vehículos por distintas infracciones, en cuyos expedientes se había identificado falsamente a la perjudicad, fueron abonadas a lo largo de 2017 por sus titulares, una vez destapado el caso judicialmente.

En el banquillo de los acusados iban a sentarse también la madre del dueño del taller, que habría firmado tres impresos, y otra persona que también presentó varios documentos en el Concello con los datos de la víctima, pero su caso fue sobreseído ya en instrucción, porque no pudo acreditarse que colaboraran conscientemente en la actuación ilícita de José Carlos P.P. También se sobreseyó la causa contra otras cinco personas, una de ellas por haber identificado a la perjudicada como conductora, sin saberse como consiguió los datos.