José Antonio Prieto Fernández, el ourensano de 60 años de edad que el pasado diciembre presuntamente disparó dos tiros a su expareja sentimental en la localidad pontevedresa de O Grove antes de intentar suicidarse, ingresó ayer en la prisión de A Lama. Su comparecencia judicial se retrasó hasta este enero ya que permaneció hospitalizado por las graves heridas de bala que se causó.

Fue concretamente a las 13.00 horas de ayer cuando este hombre fue puesto a disposición judicial en Cambados. La jueza ordenó su encarcelamiento provisional, comunicado y sin fianza, en calidad de investigado por un delito de homicidio en grado de tentativa. También se le atribuye un quebrantamiento de condena, ya que incumplió la orden de alejamiento que le había sido impuesta el pasado verano a causa de un episodio de violencia doméstica anterior.

Este investigado es el hombre que el 5 de diciembre de 2018 habría intentado matar a Eva María A.F. -también natural de Ourense y de 47 años- en el piso que compartieron mientras fueron pareja en la céntrica calle Castelao de O Grove. La mujer, que recibió dos disparos -en la cara y el cuello-, escapó por la ventana y recibió el alta médica un par de días después.

Pero el hombre, que se había asestado otros dos tiros, para intentar acabar con su vida, empleando el mismo arma -del calibre 22-, permaneció ingresado en estado crítico -en coma inducido- durante un mes. De forma casi milagrosa logró recuperarse, y además parece que sin sufrir daños cerebrales, por lo que ya estaba en condiciones de pasar a disposición judicial.

Y se cumplió el guión previsto, pues como se había avanzado esta semana era inminente su traslado al Juzgado de Instrucción 3 de Cambados, como finalmente sucedió ayer. Compareció ante la jueza de dicha sala por espacio de dos horas y media en las que se acogió a su derecho a no declarar.

Satisfacción

Vecinos de O Grove y amigos de Eva María mostraron su satisfacción tras conocer que José Antonio Prieto está en prisión. Todos, como el alcalde José Cacabelos, coinciden en que "hay que actuar con contundencia contra la violencia de género". También ofrecen "apoyo y solidaridad" a la mujer, que trata de sobreponerse y evita hacer declaraciones para no interferir en la investigación, además de para proteger a su hija, de solo 15 años.

El investigado llegó en ambulancia desde el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, donde estuvo ingresado. Tras comparecer, salió como entró, en camilla y cubriéndose la cabeza, para ser llevado a la cárcel en otro vehículo médico, este de Protección Civil de Cambados.