Los casi 60 kilos de heroína incautados en una nave de Caldas de Reis en agosto de 2017 fue una las principales aprehensiones de esta droga en Galicia y España en los últimos años. Y el caso está a punto de llegar a juicio. La Fiscalía ya formuló su escrito de calificación provisional contra los 12 acusados, entre ellos un abogado que ejerce en Vigo, Manuel E.M., que igual que el resto de encausados -seis arousanos y otros cinco búlgaros- afronta 11 años de cárcel y 11 millones de euros de multa. El letrado, al que se atribuye un papel de liderazgo en este caso, es un jurista que ya estuvo en prisión por dos condenas de tráfico de drogas -una por otro alijo de 98 kilos de heroína-. Exmaquinista ferroviario, precisamente sacó la licenciatura en Derecho en el centro penitenciario, ejerciendo desde 2012, cuando salió del penal al que ahora se enfrenta a volver.

El fiscal acusa de delitos contra la salud pública en cantidad de notoria importancia y de integración en grupo criminal. Los acusados, relata, se interrelacionaron de modo "sostenido" en 2016 y 2017 bajo la supuesta supervisión del abogado de Vigo y de otro encausado, Juan Jesús V.P., hostelero vilanovés ya sentenciado también por tráfico de drogas. El fin, agrega el Ministerio Público, era llevar a cabo operaciones de introducción de estupefaciente en España, "cocaína y heroína", en supuesta colaboración con individuos y grupos internacionales. El letrado y el arousano, que tuvieron más de una decena de reuniones personales en el despacho profesional del primero, presuntamente "coordinaban" y "dirigían" al resto de acusados de Arousa y tenían los contactos con los proveedores extranjeros de las sustancias -con los que se habrían llegado a encontrar en la provincia de Pontevedra-.

El fiscal relata en primer lugar una supuesta operación para tratar de introducir un "cargamento de cocaína" desde Colombia -la cual finalmente se habría frustrado-. El letrado y su supuesto socio vilanovés habrían mantenido contactos telefónicos con el proveedor extranjero. Los españoles incluso adelantaron, se especifica en el escrito, 150.000 euros a los proveedores por un alijo que se introduciría a través de la costa pontevedresa. El Ministerio Público cuenta que el abogado "llegó a reunirse personalmente" con el representante de la red colombiana en 2016 en un bar de Vilanova. El hostelero arousano, por su parte, se encontró supuestamente con uno de los proveedores en un hotel de A Toxa, un asador y en centros comerciales de Pontevedra y Vigo. Otro de los gallegos acusados incluso viajó a Colombia.

En cuanto a la heroína, aquí entran en juego los búlgaros encausados, ya que eran quienes iban a entregar la droga adquirida por la red que se atribuye al letrado y al vilanovés. Para tal fin, cuenta la acusación, los búlgaros se desplazaron a Caldas en un Opel Mokka y en un camión Mercedes donde iba la droga. Pero la heroína fue incautada en una operación policial en la nave de Caldas. Eran casi 59 kilos con un valor de 2,8 millones de euros. El abogado, alias "Jacinto" o "Abogaducho", que se declara inocente, no llegó a entrar en prisión provisional por esta causa. Esta medida sí se decretó para los otros 11 acusados.